La carrera por hacer más rápidas, eficientes y sustentables las entregas de ecommerce ha llegado a un nuevo nivel.
Si bien durante años se habló de drones y vehículos autónomos como parte del futuro logístico, hoy esas ideas comienzan a materializarse en pilotos reales que integran inteligencia artificial, sensores avanzados y diseño robótico para enfrentar uno de los tramos más complejos, la última milla. Y aún más especializado, el último metro.
El crecimiento explosivo del comercio electrónico, impulsado en parte por los cambios de hábito durante la pandemia y el auge de las compras inmediatas, ha intensificado la presión sobre las empresas para ofrecer entregas cada vez más veloces, precisas y sostenibles.
Desde robots bípedos que caminan hasta la puerta del cliente, hasta drones que sortean obstáculos urbanos para entregar paquetes en minutos, el sector logístico está entrando en una nueva era donde la tecnología ya no es solo un apoyo operativo, sino el protagonista del proceso de entrega.
Estas iniciativas, antes reservadas a laboratorios de innovación o proyectos piloto muy controlados, ahora comienzan a desplegarse en entornos reales y a escalar en diversas regiones del mundo.
1- Robots humanoides que caminan hasta tu casa
Amazon ha anunciado el inicio de pruebas de robots con piernas que pueden salir por su cuenta de las furgonetas eléctricas de entrega y caminar hasta la puerta del cliente.
En un entorno experimental llamado “parque humanoide” en San Francisco, California, la compañía entrena a estos dispositivos para sortear obstáculos urbanos como escalones, banquetas irregulares o puertas cerradas.
Los robots están equipados con brazos para manipular paquetes, y se espera que trabajen coordinadamente con vehículos de reparto de Rivian y sistemas avanzados de IA generativa que les permitan tomar decisiones autónomas.

2- Drones de entrega más rápidos, seguros y autónomos
Las entregas aéreas siguen ganando terreno. Amazon ha desarrollado el dron MK30 como parte de su programa Prime Air, con capacidad para evitar obstáculos imprevistos y entregar en menos de una hora. Ya operan pruebas en áreas seleccionadas de California y Texas.
Por ejemplo, si vives cerca del centro logístico de Amazon en Tolleson, Arizona, y compras un artículo elegible que pesa 2.2 kilos o menos, el dron puede entregar tu compra en áreas designadas cerca de direcciones seleccionadas en 60 minutos o menos.

Pero no es la única empresa en esta carrera. Zipline, una compañía nacida en África y especializada en entregas médicas, ha expandido sus servicios a Estados Unidos con asociaciones con Walmart y cadenas de restaurantes.
Sus drones operan desde centros logísticos automatizados y utilizan cables para descender los paquetes con precisión quirúrgica.

Otras firmas como Wing (de Alphabet), Manna y DroneUp también desarrollan drones de reparto en zonas urbanas y suburbanas, enfrentando desafíos normativos y de navegación con soluciones cada vez más sofisticadas.

3- Robots sobre ruedas para recorridos vecinales
Mientras que los drones dominan el aire, sobre la tierra destacan los robots de entrega autónoma. Starship Technologies ha desplegado miles de pequeñas unidades con seis ruedas que recorren calles y aceras en más de 100 ciudades del mundo.
Estos robots pueden transportar alimentos, abarrotes o paquetes pequeños, y se desplazan con precisión gracias a sistemas GPS y cámaras.

Amazon, por su parte, desarrolló Scout, un robot que realiza entregas en vecindarios seleccionados de Estados Unidos.
Aunque su despliegue masivo aún está en evaluación, forma parte del portafolio de automatización que la compañía explora para cubrir entregas locales sin intervención humana.

4- Ciudades laboratorio: drones y robots en ecosistemas urbanos
En Alemania, el proyecto EfeuCampus ha convertido un distrito de la ciudad de Bruchsal en un laboratorio viviente para probar soluciones logísticas autónomas.
El campus integra drones de carga, robots terrestres eléctricos y contenedores inteligentes para gestionar entregas urbanas sin emisiones. Además, los residentes pueden recibir sus paquetes mediante estaciones automatizadas conectadas a esta red.

Este tipo de iniciativas apuntan a resolver el reto que representa la última milla en entornos densamente poblados, y a reducir el impacto ambiental de la logística urbana.