Brasilia, (EFE).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, encabezó la inauguración de una planta de fertilizantes de la empresa suiza EuroChem, que consideró como un paso para romper la fuerte dependencia que la vigorosa agricultura del país tiene de ese producto.
"Si Brasil es un país agrícola con un potencial extraordinario, casi imbatible, por qué no somos autosuficientes en fertilizantes", planteó Lula, quien enmarcó la inversión de EuroChem, cifrada en mil millones de dólares, en la búsqueda de la "autosuficiencia".
El autoabastecimiento de fertilizantes, según el mandatario, "es uno de los derechos que debe tener un país soberano", sobre todo en su gran condición de productor de alimentos, a los que calificó como "el arma de guerra más importante" que existe en el mundo, pues de ellos "depende la supervivencia de todas las especies".
Lula lamentó que, el año pasado, Brasil "pagó más de 25 mil millones de dólares en importaciones" de fertilizantes, un dinero "que podría haber quedado en este país, generado empleo y riqueza en este país" y que "finalmente se fue" al exterior.
La planta inaugurada, según EuroChem, tendrá una capacidad de producción de un millón de toneladas de fertilizantes fosfatados por año.
Eso representa el 15% de la demanda actual de la agricultura nacional, a la que se volcará la totalidad de la producción de esta nueva planta.
Pese a ser uno de los mayores productores mundiales de alimentos, el 80% de los fertilizantes utilizados en Brasil son importados de diversos países, y sobre todo de Rusia, que provee el 25% de ese total.
Estas nuevas operaciones de EuroChem están enmarcadas en un plan aprobado en noviembre pasado por el Gobierno, que prevé fomentar las inversiones en ese sector con la meta de que la producción brasileña de fertilizantes represente al menos el 50% de la demanda interna para el año 2050.
El llamado Complejo Minero Industrial de EuroChem en Serra do Salitre, localidad de sólo 10 mil habitantes, generará en su fase inicial, según datos de la empresa, unos mil 500 empleos directos y tres mil indirectos. EFE ed/mp/mfr