El litio es uno de los elementos fundamentales para la transición energética y ha sido considerado como un recurso estratégico por los países de la región que cuentan con yacimientos abundantes.
Por ello, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) recalca la importancia de generar una agenda de desarrollo productivo en torno al litio.
Pide promover su extracción en beneficio de las actividades económicas directa e indirectamente relacionadas al mineral, según el informe Extracción e industrialización del litio. Oportunidades y desafíos para América Latina y el Caribe.
En el documento, la CEPAL examina el papel de los países productores de litio de la región (principalmente Argentina, Brasil y Chile) en la cadena de valor global de las baterías de iones de litio (principal uso actual del litio).
También revisa los regímenes de gobernanza, normativo y fiscal que determinan el funcionamiento de la explotación del mineral en los países del llamado “triángulo del litio” (Argentina, Bolivia y Chile).
El informe concluye con lineamientos de políticas públicas que pueden contribuir a una agenda de desarrollo productivo en torno al litio.
También destaca la industrialización de éste y otros minerales en tecnologías limpias para la transición energética y la electromovilidad.
Litio, insumo insustituible
Según la CEPAL, el litio es un insumo hasta ahora insustituible para la producción de las baterías de iones de litio, una tecnología clave para la descarbonización del transporte y el almacenamiento de energía generada a partir de fuentes renovables.
Por tanto, tiene posibilidades de contribuir al desarrollo económico de los países mediante un impacto positivo a partir de una mayor creación de valor, es decir, del aumento del producto, de las exportaciones, del empleo y de la recaudación fiscal.
En la región el recurso es considerado estratégico en Argentina, Bolivia, Chile y México.
Ello debido al potencial que tiene para promover el desarrollo socioeconómico, la agregación de valor y los encadenamientos productivos que contribuyan a un proceso de cambio estructural de las economías.
El litio en América Latina
El informe indica que los recursos identificados de litio en América Latina y el Caribe se concentran en el denominado triángulo del litio (56% de los recursos de litio mundiales).
Además, es posible encontrar litio en menores cantidades en Brasil, México y Perú, elevando los recursos de litio encontrados en la región a casi 60% de los recursos mundiales.
Asimismo, la región concentra el 52% de las reservas mundiales de litio, localizadas principalmente en Chile (41%) y Argentina (10%).
Agrega que el combate al cambio climático, con vistas a la transición hacia energías renovables y la electromovilidad, es el principal motor que hace disparar la actual y futura demanda por litio.
Crecimiento de la demanda
Su demanda podría multiplicarse por 42 en 2040, de acuerdo con el escenario de desarrollo sostenible de la Agencia Internacional de Energía.
Las tecnologías de energías renovables variables o intermitentes y la electromovilidad son más intensivas en minerales, ya que requieren de una mayor masa y número de ellos.
Asimismo, el crecimiento de la demanda explica en gran medida el aumento exponencial de su precio y de otros minerales utilizados en estas tecnologías en los últimos años.
Los precios del litio se multiplicaron casi nueve veces entre 2021 y 2022, señala el documento.
Actores como China, Estados Unidos y la Unión Europea lideran la electromovilidad y cuentan con una serie de políticas que buscan asegurar el suministro de minerales considerados críticos para la transición energética.
Solo tres países explotan litio a gran escala comercial en la región.
En 2021, Argentina representó el 9.8% de la producción mundial, Brasil el 0.4% y Chile el 41%.
Ese mismo año, los cuatro mayores productores de ese metal a nivel mundial (en orden de importancia, Australia, Chile, China y Argentina) concentraron más del 96% de la producción global.
Eso ha motivado a los países productores de baterías de ion-litio a incluir el mineral en su listado de minerales críticos.