Diez estados mexicanos de la región norte y sur formarán parte del Corredor T-MEC, una obra logística que encabeza el fondo institucional Caxxor Group.
La apuesta de este proyecto es unir por medio del ferrocarril a México, Canadá y Estados Unidos para el manejo de mercancía portuaria.
Pretende una mayor conexión con la costa Este de Estados Unidos y los centros logísticos canadienses, así como mercados hacia Centro y Sudamérica. Para hacerlo realidad se destinará una inversión de 3 mil 300 millones de dólares.
Beneficios del Corredor T-MEC
El corredor pretende atraer a empresas estadounidenses establecidas en Asia, que volverían al continente americano gracias a las bondades económicas planteadas en el acuerdo comercial. También persigue que compañías asiáticas busquen establecerse en la región.
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La primera etapa de desarrollo se centraría en la construcción de un nuevo puerto de carga en Mazatlán, Sinaloa (SI-PORT) y 180 kilómetros de vía ferroviaria hacia Durango.
Su construcción requerirá de una inversión de 900 millones de dólares, y la rehabilitación de 167 kilómetros de ferrocarriles mexicanos, así como la construcción de otros 180 kilómetros de vías.
Se espera que permanezca vigente durante los próximos 40 años antes de requerir modernizaciones.Además, sería uno de los primeros centros ferroviarios del país con tecnología automatizada.
Construcción del Corredor T-MEC
La construcción se contempla en cinco etapas y su ubicación se dará a conocer a fines de enero. La conclusión de su primera fase se espera para 2024 y alcanzaría su etapa máxima en 2035.
Desde Sinaloa, el corredor conectará con Durango, Monterrey, Dallas, Tulsa y Chicago. En esas ciudades se podrá atender a los exportadores de la industria automotriz.
A comienzos de año, el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, realizó su primera visita a Sinaloa para comprobar las posibilidades de la entidad para albergar dicho mega proyecto.
Junto con este plan, existen 50 diferentes proyectos de inversión que tienen a Mazatlán en la mira, incluyendo la creación de un parque aeroespacial.
¿En dónde impactará?
Esta obra ferroviaria impulsaría iniciativas logísticas en Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y Chihuahua. Mismo caso ocurrirá en zonas del sur del país como Chiapas, Campeche, Tabasco y Quintana Roo.
El Corredor T-MEC iría integrando poco a poco otras inversiones, como las realizadas en Puerto Chiapas, donde ya se destinaron 273 millones de dólares.
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También en puerto Soto La Marina, en Tamaulipas, se conjuntaron los esfuerzos de Caxxor Group y la firma energética Coessa para aumentar la capacidad de esa zona e incluir una terminal de combustibles. Esto por un costo de 450 millones de dólares.
El Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE) pretende inscribir al Corredor T-MEC en el catálogo de inversiones para la reactivación económica del Consejo Coordinador Empresarial.
A la espera de que los trabajos del corredor T-MEC se extiendan, entidades como Chihuahua esperan potenciar sus industrias con mayor presencia, como la aeroespacial y la metalúrgica.
Sólo ese estado tiene una oferta de hasta 250 mil pies cuadrados de naves industriales con capacidad para atender las necesidades de la inversión nacional y extranjera, según un análisis de la plataforma inmobiliaria Solili.
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