De acuerdo con la 17ª Encuesta Global de Directivos Automotrices 2016 de KPMG International, la conectividad y digitalización conforman la tendencia número uno que se mantendrá hasta 2025, coinciden los principales líderes de la industria automotriz.
Alrededor de 70% de los 800 directivos de la industria automotriz de 38 países encuestados, indican que el uso de datos está en una etapa temprana. Mientras que el 32% de los directivos de la industria a los que se realizó la encuesta consideran que los fabricantes de equipos originales (OEM, por sus siglas en inglés) -como “propietarios” de los datos generados de su vehículo- son en quienes más confían los compradores. Sin embargo, 54% de los clientes encuestados indican que solo confían en ellos mismos respecto a los datos generados en su auto.
En lo referente al mercado mexicano, KPMG señaló que registró una producción de 3.4 millones de automóviles, lo que representa un aumento de casi 10% en comparación con el año anterior, impulsado principalmente por la apertura de nuevas plantas y el fuerte crecimiento tanto del mercado estadounidense y del nacional.
Este dato coloca a México en el séptimo lugar en fabricación de automóviles en el mundo. Las exportaciones crecieron en el mismo porcentaje (10%) y la mayoría de las exportaciones (poco más de 80%) se realizaron a los Estados Unidos.
“El mercado estadounidense está en aumento constante, situación que es favorable para la industria automotriz en México, pero que al mismo tiempo representa una amenaza, ya que la industria mexicana depende en gran medida del desempeño del país vecino”, apuntó Albrecht Ysenburg, Socio Líder de la Industria Automotriz de KPMG en México.
Este año se registró un aumento histórico en las ventas nacionales, con un incremento de alrededor de 20%, representando 1.4 millones de unidades vendidas. Del valor total en ventas totales, alrededor de 40% corresponde a autos compactos y subcompactos.
“Se estima que para 2016 la industria automotriz represente alrededor de 3% del PIB del país. Las perspectivas para la industria mexicana son alentadoras gracias a las nuevas plantas que se abrirán este y los años siguientes; esto se traducirá indudablemente en un aumento en la capacidad de producción y nuevas inversiones, algunas ya anunciadas por varios OEM. En cuanto a ventas, se espera un incremento en el futuro próximo, pero no en el mismo porcentaje como hemos visto durante 2015”, declaró Ysenburg.
Referente al tema de innovación en el mercado, la encuesta señaló que 35% de todos los encuestados esperan que las compañías automotrices tradicionales sean innovadores revolucionarios dentro de la industria y estén entre los recién ingresados al mercado en los próximos cinco años.
“Creemos que estos cambios ayudarán a transformar a la industria en el próximo ciclo de desarrollo y debemos ver dichos cambios como una gran oportunidad y no como un riesgo”, concluye Albrecht Ysenburg, Socio Líder de la Industria Automotriz de KPMG en México.