“Para las empresas de manufactura enfocadas en cimentar las bases de la industria 4.0 y en continuar innovando, queda claro que ocuparse de alcanzar la hiper disponibilidad debe ser una prioridad. Los equipos de TI pueden entregarla en la práctica creando un plan de continuidad de negocio viable, basado en una estrategia que proteja todas las unidades de negocio críticas en la cadena de suministro”.
Ello, sin afectar la experiencia de empleados y clientes, con la meta de alcanzar tiempos de recuperación de menos de 15 minutos. Así como gestionando los datos de forma inteligente y eficiente, sin importar si se encuentran dentro de la empresa, en la nube o en ambientes virtuales. Además, es vital realizar pruebas de estrés con regularidad para identificar los puntos débiles antes de que ocurra un problema real.
También, considerando la importancia de la continua visibilidad y monitoreo, clave para prevenir situaciones que afecten la operación: Esto facilita a los departamentos de TI responder con la eficiencia y velocidad requeridas, también trae ahorros de tiempo y dinero, en relación con el cumplimiento a regulaciones específicas de la industria, expone el directivo.
“El éxito de la implementación de la industria 4.0 consiste en lograr un perfecto equilibrio entre la introducción de tecnologías innovadoras y la garantía de la hiper disponibilidad para evitar que las operaciones se detengan. Sólo así las empresas de manufactura podrán realmente abrazar la era digital y sacar ventaja de lo que el futuro cercano tiene preparado para ellas”.
Comenta que su evolución para los siguientes tres años es sorprendente, pues según datos de IDC, para 2019, 50% de las empresas de manufactura usarán crowdsourcing y realidad virtual para colaborar con clientes y consumidores para el diseño de productos; en 2020, seis de cada 10 dependerán de plataformas digitales que potenciarán sus inversiones y soportarán hasta el 30% de sus ingresos.
Y hacia 2021, el 20% de las organizaciones estará aprovechando la inteligencia embebida, utilizando el internet de las cosas (IoT) y el blockchain para automatizar procesos a gran escala y acelerar sus tiempos de ejecución hasta en 25%.
“Este ritmo hacia la innovación traerá interesantes recompensas, pero al mismo tiempo aumentará la complejidad para la industria manufacturera, dado que en esta era se potencializan los daños que puede provocar la interrupción no planeada de las operaciones”, explica el representante de Veeam.