Una cadena de suministro segura requiere de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial, pero también de protocolos de actuación bien definidos ante contingencias y activos e infraestructura física que contribuyan a la resiliencia de las operaciones.
En la medida en que más dispositivos tecnológicos estén presentes en las operaciones se vuelve necesario contar con un flujo de datos bien estructurado que nutra la torre de control o centro de monitoreo de las empresas.
“Lo que más me preocupa de la implementación rápida (de nuevas tecnologías) es el nivel de torre o centro de control que suelo observar de forma común”, afirmó Roberto Rosello, director general de Monitoreo 360.
Para que una empresa pueda confiar la seguridad de su almacén a una red de cámaras de videovigilancia con IA tiene que asegurarse de que esa tecnología tiene un respaldo y una resistencia adecuadas.
“Si vamos a reemplazar personas por tecnología tenemos que asegurarnos de ajustar los procesos. Y el lugar más importante es la torre de control”, mencionó durante una reunión con miembros del Consejo Nacional de Ejecutivos en Logística y Cadena de Suministro (ConaLog).
Tres claves para una torre de control que acompañe la estrategia
El directivo de la firma especializada en seguridad electrónica abundó que lograr una visibilidad End to End, en todo el ciclo de vida de la cadena de suministro -desde la planificación y fabricación hasta la entrega y devolución- es indispensable para lograr una torre de control profesional y segura.
“El producto desde que se fabrica hasta que se vende en un local es uno solo”, plantea Rosello, por lo que no es válido pensar que la seguridad solo recae en la persona o empresa que tenga los productos en el momento de algún incidente a lo largo de la cadena.
Asimismo, la torre de control debe considerar la interacción con otros actores alrededor de la cadena como las autoridades, los transportistas o los almacenistas, pero más allá de esta coordinación 360 y de que sea E2E, debe tener los niveles de resiliencia que aplicamos a otras tecnologías de la información, especialmente cuando el Centro de Monitoreo tiene un alto componente tecnológico y de Inteligencia Artificial.
La resiliencia tecnológica que se ha construido en los últimos 30 años inicia con el poder asegurar el suministro de energía de manera ininterrumpida y la estabilidad de la conectividad requerida para operaciones cada vez más digitales. “La resiliencia es el gran desafío y cómo se ajusta con el área de TI”, mencionó.
El factor clave de la estrategia
Roberto Rosello consideró que la resiliencia es vital en un mundo donde la delincuencia va dos pasos adelante en la adopción de las tecnologías, en comparación con las empresas.
“La implementación de la tecnología en actividades logísticas es lenta”, tanto que -aseguró- puede ser más rápido contratar a una persona de seguridad que instalar cámaras en el almacén.
Raúl Monroy, director de la empresa de transporte TMS, reconoció que la tecnología tiene un papel relevante en la estrategia de seguridad de la cadena, pero también el capital humano por lo que consideró relevante contar con cultura de la honestidad entre los colaboradores, particularmente de los operadores.
Se trata de una estrategia totalmente preventiva en la que se incluyó la prohibición del robo de combustible por parte de los operadores. Recordó que al inicio no fue sencillo, pues los operadores nuevos ya no querían trabajar en TMS.
“Cuando quitas desde el inicio esa práctica, cambias la mentalidad y la cultura de la gente. Hoy somos una compañía prácticamente libre de robo de combustible y también con excelentes resultados en cuestión de seguridad, en temas de robos” dice.
La IA para robustecer la seguridad
De acuerdo con el líder de Monitoreo 360 hacia 2027 se empezará a ver el uso de cámaras de video que además de grabar puedan analizar y hacer reportes de los acontecimientos en tiempo real.
Estos dispositivos se irán sumando al ecosistema tecnológico que captará información desde distintos puntos del almacén y de otras actividades logísticas de las organizaciones.
El reto siguiente será la gestión de la información, en especial, de empresas con amplias redes logísticas. Será una cadena de información que vendrá de lo que generen los locales, los Centros de Distribución y las redes primarias y secundarias.
Aseguró que hoy mucho del análisis de la información se hace manual; pero las capacidades de la IA “para resumir grandes volúmenes de datos harán más preciso el análisis que hoy es imposible para todos”, dijo.