Las disrupciones en la cadena de suministro persistieron en 2023.
Conflictos geopolíticos existentes o nuevos, la variación inflacionaria, la amenaza de la recesión y fenómenos meteorológicos afectaron el tránsito y acceso a las mercancías.
También impactaron en los costos logísticos y, en general, mantuvieron a las cadenas de suministro bajo presión.
Por tal motivo, en nuevo e-book en THE LOGISTICS WORLD repasamos las grandes tendencias que marcaron el rumbo de la industria en estos 12 meses.
Más importante aún, ofrecemos un panorama del aspecto tecnológico y de tendencias de cara a 2024.
IA, la tecnología de mayor impacto
La inteligencia artificial (IA) fue quizás la tecnología que más dominó diversos aspectos del quehacer industrial y empresarial en general.
Una encuesta realizada por Gartner a altos directivos de cadena de suministro reveló que esta sería la tecnología de mayor impacto en su industria durante los próximos tres años.
Mark Raskino, Analista Vicepresidente Distinguido de la firma, comentó que “el miedo a perderse de ella” es un poderoso impulsor de los mercados tecnológicos.
21% de los altos directivos de supply chain piensa que la IA generativa tendrá un impacto profundo en sus modelos comerciales y operativos.
En THE LOGISTICS WORLD compartimos un artículo de Jose Milla, Director de Logística y Transporte de Mercado Libre, quien compartió que esa tecnología se ha convertido en un “aliado de valor”.
La IA es ahora utilizada para la previsión de la demanda y predecir las ventas futuras de productos específicos durante la peak season.
De esa forma, las empresas pueden almacenar la mercancía en el centro de distribución más cercano al domicilio del comprador.
Al mismo tiempo les ayuda a optimizar el inventario, tener mayor certeza en los tiempos de entrega y asignar los recursos de manera más ordenada.
Aspectos para impulsar el nearshoring
Otra de las tendencias que sonaron desde el comienzo del año fue el nearshoring.
Mucho se ha analizado sobre su potencial, no solo en la economía, sino también en la logística, la inversión extranjera, y la manufactura en el país.
Apenas en octubre pasado el gobierno mexicano anunció incentivos fiscales de hasta 89% para las compañías que instalen su producción en el país.
La directora general del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Valeria Moy, dijo que el país está en un momento y lugar privilegiados en materia económica para los entornos globales.
Sin embargo, detalló que hay ciertos aspectos que se deben de atender para que el nearshoring realmente detone en el país.
Entre ellos mencionó:
- Garantizar insumos básicos
- Gente con la preparación necesaria
- Infraestructura óptima
Indicadores volátiles
La incertidumbre económica fue una de las mayores preocupaciones de los CEOs durante 2023.
La volatilidad de indicadores como la inflación, las tasas de interés, los costos y el riesgo de una recesión económica pusieron en alerta a muchas empresas en diferentes partes del mundo.
Expertos señalaron que para mitigar esas situaciones se necesitan cadenas de suministro variables.
Además, una de las principales industrias, la automotriz, tuvo variaciones importantes por diversos factores y no parece que el escenario cambie mucho para el 2024.
La electromovilidad es esa tendencia que parece irá cobrando mayor fuerza en la medida que las compañías centren más sus esfuerzos en la producción de vehículos eléctricos (EVs).
En el caso de México, el anuncio de Tesla de construir una planta de vehículos en Monterrey representa un reto y al mismo tiempo una oportunidad que modificará la producción en el país.
Nuestra nación se perfila para ser potencia de vehículos eléctricos en Norteamérica y el mundo, aseguró José Zozaya, Presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
Ésta y otras declaraciones al respecto y otros temas puedes consultarla en nuestro e-book gratuito, con detalles de otras tendencias que impactarán significativamente al mundo empresarial y logístico el siguiente año.
*Con información de Ilse Maubert