SSI SCHÄFER implementó el sistema Miniload en Riachuelo, a fin de mejorar las operaciones de ropa colgada, productos en cajas y productos de alto valor agregado, con el uso de robots dedicados a almacenar y retirar las cajas automáticamente en un área de 100 mil metros cuadrados, con lo que la empresa brasileña del sector moda revolucionó su estrategia e implantó un nuevo modelo de negocio.
La multinacional alemana mencionó que son más de 100 docas para recibimiento, algunas destinadas exclusivamente para productos en perchas, y expedición; y un translog con una extensión superior a 5 mil metros que transporta las prendas colgadas, las cuales son separadas automáticamente primero por categoría y posteriormente por tienda.
También fueron instalados carroussels operando bajo el concepto de separación producto al hombre, estaciones de separación put to light, almacenes verticales Logimat para el almacenamiento de productos de alto valor agregado y carroussels operando como un buffer de expedición de cajas. Todo conectado en aproximadamente cinco kilómetros de esteras.
Con estos cambios, Riachuelo reemplazó colecciones enteras en semanas o días, de acuerdo con los intereses de sus consumidores; ahora, en vez de producir la mayor parte de una colección antes de llegar a las tiendas, analiza el desempeño de las ventas para decidir lo que será fabricado. Dicha estrategia está basada en el concepto push and pull, para una producción empujada y halada.
“La producción empujada se inicia antes del pedido de compra del cliente y es más enfocado en tener estoque. En este caso, se toma en cuenta el histórico de ventas de un determinado producto o el comportamiento del mercado. Ahora, en la producción halada no se utilizan estoques, siendo el cliente el personaje principal, pues es él quien determina el inicio de la producción, es decir, la producción se inicia solo a partir de la demanda del cliente”, explicó SSI SCHÄFER en un boletín.
Maurício Paniquar, Director Logístico de Riachuelo, dijo que en la compañía tenían un modelo de operación antiguo diseñado para un concepto de cadena empujada y “nos dimos cuenta que estaríamos por fuera del alineamiento estratégico de la empresa si continuábamos de esa forma. Nosotros prácticamente necesitábamos revolucionar toda la estrategia de operación de nuestra logística”.
Se agregó que Riachuelo necesitaba un CEDIS para coordinar todos los pedidos en el recibimiento, separarlos y entregarlos, muchas veces unitariamente y más de una vez por semana a cada tienda; además estaba próxima a comenzar en e-commerce para convertirse en una empresa omnichannel. Por lo que buscaron un aliado que les ofreciera una solución integral y flexible, con capacidad de unir diversos modelos de operación, tanto de ropa colgada como cajas e ítems de alto valor agregado; entonces investigaron durante siete meses y analizaron operaciones en Estados Unidos, América Latina y Europa, hasta decidieron usar el mix de soluciones de SSI SCHÄFER.