Con un presupuesto de 5 mil 250 millones de dólares, las obras de ampliación del Canal de Panamá continúan y se vislumbra que se terminen en el 2014, según Alberto Alemán, ingeniero administrador y encargado de la fase de construcción.
De acuerdo con el ingeniero, las obras van bien y el programa se encuentra dentro y debajo del presupuesto, ya que todas las obras se han contratado a un valor inferior a lo calculado en un comienzo.
El acrecentamiento en la vía interoceánica, apuntala a establecer exclusas más grandes y canales más profundos así como el aumento de la capacidad del Canal en términos del tamaño del barco, con lo que las economías de escalas tienen una incidencia muy importante en el valor del producto puesto en el mercado, aseguró Alemán.
Con respecto al intercambio comercial entre América Latina, el funcionario subrayó que se van a exportar productos a mercados donde anteriormente no se podía llegar. “Con los insumos pasa la misma cosa. Hay otros temas como el caso de la carga contenerizada. Con un barco de mayor volumen, en lugar de ir de punto inicial a punto final, se podrá tener más flexibilidad. Así, un navío que salga de Chile puede hacer una parada en Perú o en Ecuador, recoger carga allí, parar en Panamá, distribuir carga que vaya para Asia o para un puerto en El Salvador, Venezuela o Colombia”.
Resaltó que el hub de Cartagena conecta con esta ruta (del Canal de Panamá) que está muy cerca y es la puerta de acceso al Caribe. De la misma forma, Colombia tiene varios centros de producción distribuidos en un territorio vasto. Eso obliga a mejorar los sistemas de intercomunicación. Las nuevas realidades del mundo y las ventajas del Tratado de Libre Comercio pueden llevar a que aquí operen varios eslabones de una cadena productiva en la que participen diferentes países.
“Los proyectos de infraestructura tanto en el Pacífico como en el Atlántico son buenos, porque en la medida en que exista infraestructura, sea de carreteras, ferrocarriles o puertos, se estará desarrollando el comercio y la región, aparte de ofrecer alternativas y oportunidades de poder hacer más productos. En Panamá tenemos un sistema intermodal, que comprende puertos, ferrocarril y carreteras, pero estos no compiten con el Canal, sino que lo apoyan. Con cualquier otra iniciativa pasaría lo mismo”, puntualizó el encargado de la construcción.
A modo de conclusión, mencionó que las obras de ampliación deben emular las mejores prácticas internacionales en cuanto a infraestructura, para que haya un mayor impacto en Latinoamérica y establecer nuevas reglas de juego de la logística en el mundo.
Fuente: Portafolio.co