La participación del ferrocarril en el mercado de transporte terrestre en México ha incrementado 25%, medido en toneladas kilómetro, en más de 20 años, apuntalado por las inversiones en las vías ferroviarias que entre 1997 y 2017 sumaron un total de 8 mil 500 millones de dólares, enfocados principalmente al equipamiento e infraestructura de esta vía, indicaron representantes de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF)
Estos resultados se obtuvieron a partir de un análisis técnico y económico que calculó que el ferrocarril incrementó su participación en el mercado de transporte terrestre de 18% en 1995 a 25% al día de hoy; mientras que el volumen movilizado en este mismo periodo pasó de 37 mil 600 millones de toneladas kilómetro a 86 mil 332 millones de toneladas kilómetro.
Lo anterior ha sido posible gracias a que entre 1997 y 2017, las inversiones en las vías ferroviarias se han proyectado con un fuerte empuje al colocarse en un total de 8 mil 500 millones de dólares; enfocados de manera significativa al equipamiento e infraestructura; como lo demuestra el presupuesto en 2018 por alrededor de 500 millones de dólares más destinados al fortalecimiento del sector, mencionó Iker de Luisa Plazas, Director General de la AMF.
Destacó el desarrollo del sector en dicho periodo, lo que denota la importancia del sector ferroviario en la relación crecimiento del producto interno bruto-transporte de carga en el país. “La industria ferroviaria del país se ubica en el décimo lugar en el comparativo de carga ferroviaria a nivel mundial”, mencionó De Luisa Plazas en el marco del 24 Congreso anual de agentes navieros organizado por la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC).
Asimismo, subrayó que la participación de transporte ferroviario en la movilización de carga desde y hacia los puertos marítimos fue del 36% para Veracruz; 19% para Lázaro Cárdenas; y 25% registradas hacia Manzanillo, por tanto -dijo el directivo- “es vital crear estrategias que maximicen la productividad en la cadena logística, con una mayor efectividad en los procesos de aduanas e inspección”.
Mismos que en 2017 registraron un carga total de 31 millones 293 mil 599 toneladas en Manzanillo; 7 millones 494 mil 542 toneladas de granel agrícola manejado en Veracruz; 16 millones 137 mil 791 toneladas de granel mineral en Lázaro Cárdenas; 20 millones 538 mil 195 de carga contenerizada en Manzanillo.
En tanto, la movilización de vehículos fue de un millón 32 mil 692 vía Veracruz; 23 millones 469 mil 274 toneladas de petróleo y sus derivados movidos en Coatzacoalcos; y 4 millones 923 mil 72 de carga de fluidos desde el puerto de Altamira.
Entre los retos que continúan en la agenda del sector está redoblar esfuerzos para garantizar la seguridad en las vías por donde transita el tren a fin de mantener el crecimiento a ritmo constante en carga ferroviaria movilizada a través de los puertos marítimos. Otros desafíos en el corto y mediano plazo son el presupuesto federal 2019; la convivencia puerto-ciudad-ferrocarril, fuera de la API, como el túnel Manzanillo y el libramiento puerto Veracruz.
También las inspecciones en aduanas en coordinación institucional con la comunidad portuaria; lo referente a la Reforma Energética, como tanquería en puertos y ferrocarril y las nuevas inversiones portuarias y el aprovechamiento de los activos existentes de Petróleos Mexicanos (PEMEX) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Finalmente, lo relacionado con las Zonas Económicas Especiales (ZEE), desde las nuevas zonas industriales, los puertos y el ferrocarril -Coatzacoalcos, Salina Cruz, Puerto Chiapas. La inversión privada a Ferroistmo-Chiapas Mayab; el enfoque supranacional -LA Long Beach, Corpus Christi, Ampliación Canal de Panamá. Y el fortalecimiento de la seguridad en las vías del tren y el derecho de vía.