Una vez que se establezca un régimen fiscal adecuado, Méxicopodría volverse más competitivo en el sector manufacturero, por lo que lossocios estadounidenses se decidirían a trabajar en nuestro país en vez dedirigirse a Asia o a otras partes del mundo, y de esta forma, Estados Unidospodría tener la industria manufacturera más poderosa a nivel mundial, aseguró JoséAlberto Mejía es Socio de la Práctica de Impuestos de KPMG en México.
El especialista aceptó que las maquiladoras en nuestro paísse benefician con dos estímulos fiscales que combinan el ISR y el IETU, lo quegenera como máximo una tasa fiscal de 17.5%. La mayoría de los contribuyentesmexicanos están sujetos a la tasa de 30%. Sin embargo, dichos beneficios seincluyen en decretos presidenciales y no en la ley.
“Además, uno de los estímulos que está por prescribir en2013 cuenta con una aplicación que resulta compleja. La ley fiscal del paísrequiere un régimen bien definido, incluyendo la tasa fiscal correspondiente ala industria maquiladora a largo plazo, con el fin de permitir a losinversionistas evaluar o decidir a favor de México”, destacó Mejía.
En este contexto, el Socio de KPMG dijo que la exportaciónde los productos finales manufacturados en el país está prácticamente exenta deimpuestos. “La garantía de mantener estos beneficios es de vital importanciapara la competitividad de las maquiladoras. Hay que reconocer que ha llegado elmomento de explorar ideas nuevas y diferentes para la industria manufactureracon nuestros vecinos estadounidenses”, abundó.
Aunado a ello, señaló que hay diversas ventajas con el paísdel norte, tales como los 3 mil 200 kilómetros de frontera, en donde se podríaofrecer nuevos estímulos fiscales, sin embargo esto requeriría de grandesesfuerzos del gobierno mexicano con el fin de ofrecer instalacionesindustriales que igualen o excedan los estándares estadounidenses.
Entre otros beneficios, aseguró que hay tres puertosimportantes que se ubican dentro de los 250 kilómetros que abarcan Tijuana yEnsenada en Baja California, y San Diego y Long Beach en California. En elGolfo de México el puerto de Veracruz abarca aproximadamente 255 kilómetros;del puerto de Houston en Texas al puerto de Tampico los separaran 960kilómetros de distancia, lo cual le da a nuestro país mayor posibilidad decrecimiento.
“El establecimiento de nuevos estímulos fiscales y nofiscales alrededor de los puertos para la industria manufacturera o maquiladoracon nuestros colegas estadounidenses ha sido una oportunidad durante muchosaños, y ahora, es tiempo de hacer ver estos aspectos a los gobiernos de Méxicoy Estados Unidos para asumir un nuevo enfoque para realizar negocios juntos”,puntualizó.
Finalmente mencionó que la parte que debe estar másinteresada en la creación de cadenas de suministros mexicanos es México, puespodrían elevar a la industria nacional a un nuevo nivel, por lo que el gobiernomexicano podría analizar e incorporar nuevos estímulos fiscales y no fiscalesagresivos para fomentar las cadenas de suministro. “Este desafío requiere laparticipación de una nueva generación de hombres de negocios, tanto mexicanoscomo extranjeros”, concluyó.