El reto del sector
Juan Carlos Miranda Hernández, Director de Servicio de Transporte de FERROMEX, consideró que en los últimos años se ha registrado una mejora en el sistema ferroviario mexicano, debido a que existe una red estructurada y suficiente, salvo tramos puntuales como la reconstrucción del ferrocarril Chiapas-Mayab y la construcción de la línea directa Guadalajara-Aguas Calientes.
“Hay que considerar que los ferrocarriles son la red troncal del transporte que debe conectar los grandes centros productores y consumidores dejando al autotransporte la distribución local”, explicó.
En tiempos de recorrido, añadió, las inversiones en la vía y patios y el cambio en los procesos de servicios como el modelo de operación denominado ferrocarril programado, han permitido mejorar la velocidad de los trenes y carros. No obstante, reconoció que falta mucho por hacer.
Entrevistado por Énfasis Logística, reconoció que el verdadero reto es la edificación de libramientos urbanos, los cuales, apuntó, tienen un alto costo de inversión y beneficios primordialmente sociales que se justifican a través de metodologías de evaluación social de proyectos.
Asimismo, comentó que la línea ferroviaria que representa ha participado en convenios de convivencia urbano-ferroviaria en toda la red para la construcción de pasos elevados o a desnivel, con 25% de la inversión en este tipo de obras.
Los planes federales
Dentro del Plan Nacional de Infraestructura 2007-2012 se contempla la construcción de mil 418 kilómetros de vías férreas; la edificación de 64 pasos a desnivel; la señalización de 240 pasos a nivel y 256 cruces, así como el desarrollo de tres libramientos y cuatro cruces ferroviarios fronterizos con sus libramientos.
También en conversación con Énfasis Logística, Oscar Corzo Cruz, Director General de Transporte Ferroviario y Multimodal de la SCT, manifestó que la convivencia entre el tren y las grandes ciudades, específicamente la de la Ciudad de México, es una solución que funciona, ya que este medio de transporte es un factor de desarrollo económico y no se trata, enfatizó, de querer sacar las vías del tren de las zonas urbanas porque sí.
“Hay que resolver las molestias que causa y una manera es haciendo pasos a desnivel, libramientos y barreras automáticas correspondientes, según sea el caso. Se debe acabar con este problema en todo el país, de manera integral y a largo plazo”, manifestó.
Sobre este último punto, informó que a principios de julio se publicó una licitación para construir 60 cruceros tipo A, semáforos, barreras automáticas y superficies de rodamiento adecuadas en las zonas más conflictivas. Estos, detalló, son los primeros 60 de 240 que se tienen que construir dentro del programa de seguridad ferroviaria considerado en este año con una inversión de 300 millones de pesos.
Además de ese proyecto, explicó, también está el programa de convivencia urbana ferroviaria con inversiones cuatripartitas, donde el gobierno municipal, estatal, federal y el concesionario otorgan, cada uno, 25% del presupuesto, que dan como resultado 100 millones, los cuales multiplicados por cuatro suman 400 millones de pesos.
¿Para cuándo?
Cuestionado acerca de cuándo estarán listas las obras de seguridad ferroviaria, en dónde estarán ubicadas, cuál será su costo y qué otras comprende el programa del siguiente año, Corzo Cruz no precisó el dato, no obstante, insistió en que el objetivo y las instrucciones del gobierno federal son dar solución a esa problemática.
Sobre el hecho de que hasta el momento no son del conocimiento público los avances de las construcciones, el directivo de FERROMEX aseguró que el gobierno trabaja en esos proyectos, y justificó que éstos no son fáciles, pues existen aspectos técnicos, financieros y administrativos que deben cumplirse antes de comenzar a ver las obras. Sin embargo, confió en que en el corto plazo se irán concretando los proyectos.
Con respecto a la metas de infraestructura ferroviaria gubernamental, opinó que son obras que requiere el país y necesitan de financiamiento del gobierno, particularmente del federal. La infraestructura ferroviaria es y seguirá siendo del Estado, y la construcción de vías férreas está definida en la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario de utilidad pública, subrayó Miranda Hernández.
Por su parte, Corzo Cruz confió en que este año se puedan concluir algunos de los libramientos contemplados en el programa y en que la Cámara de Diputados les autorice más recursos “no nada más para que la ciudad viva mejor, sino para que el tren sea más eficiente para abatir costos y ser más competitivo”.