Como parte de su estrategia de crecimiento y mejora de servicios, Panalpina adquirió dos nuevos aviones Boeing 747-8F, que sustituyen a los Boeing 747-400F en la red de control propia. Con la adquisición de estas aeronaves, informó la empresa, se optimizará la capacidad de carga en 16% de volumen adicional, además de que se reducirán las emisiones de carbono en un 12%.
Durante la presentación de los nuevos cargueros, el COO Global de la compañía, Karl Weyeneth, contrastó que en un contexto difícil para el sector aéreo debido a disminución de volúmenes, tarifas impactadas y situación económica compleja, en Panalpina existe un espíritu positivo, tanto que se aumentaron las capacidades de cargamento y con ello las posibilidades de servicio.
Explicó que la estrategia de negocios y servicio de Panalpina incluye operaciones tercerizadas (mediante alianzas como las que se tienen con Cargolux y Lufthansa), así como operaciones controladas de manera interna. Esta doble posibilidad, dijo, brinda flexibilidad al servicio aéreo para gestionar sin contratiempos alzas y bajas en la demanda. Asimismo, agregó, la empresa de carga utiliza aeropuertos menos congestionados, lo que permite una mayor eficiencia de manejo de la mercancía en tierra.
Dentro de este modelo de negocio, abundó, las nuevas aeronaves marcan un hito para ofrecer a los clientes la mayor innovación y una respuesta a la demanda de aviones de última generación en segmentos como automotriz, electrónica e incluso el farmacéutico. De hecho, con los Boeing 747-8F será posible brindar una solución integral de cadena de frío de puerta a puerta, informó Weyeneth.
Por su parte, Ferdinand Kurt, CEO Regional para las Américas, remarcó el compromiso de esta empresa de transporte con México debido la apertura que ha mostrado el país hacia los mercados internacionales, lo que lo convierte en uno de los puntos de importancia en la cobertura de Panalpina. “Estamos enfrentando un ambiente con mucho reto, la situación económica es difícil, pero en Panalpina vemos este contexto como una oportunidad para entregar una gran propuesta de valor: pasión y espíritu son las claves de Panalpina”, aseguró.
Con el nombre de “Espíritu de Panalpina” y “Pasion of Panalpina”, estos aviones cargueros volarán rutas destinadas y controladas por la propia empresa, tanto para importaciones como exportaciones, con 2 a 3 salidas por semana entre Luxemburgo, México y Guadalajara, para carga general, sobredimensionada, peligrosa o con temperatura controlada.
Actualmente, la división de carga aérea de Panalpina tiene presencia en 80 países a través de una plantilla de 4 mil empleados y servicio en los más importantes aeropuertos del mundo.