Bruselas, (EFE).- La Comisión Europea autorizó este lunes a Alemania a ayudar con 902 millones de euros a la empresa sueca Northvolt a construir una fábrica de producción de baterías para vehículos eléctricos, en el marco del objetivo de la UE de dotarse de una industria de baterías propia.
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La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea (CE) encargada de Competencia, la danesa Margrethe Vestager, explicó en rueda de prensa que ese apoyo económico "es la primera ayuda individual autorizada para evitar el desvío de una inversión fuera de Europa".
La ayuda alemana a la fábrica de Northvolt es un paso importante hacia la electrificación del transporte en Europa preservando al mismo tiempo la igualdad de condiciones dentro del mercado único".
La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea
Por su parte, el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, señaló en rueda de prensa que "mientras se mantenga la igualdad de oportunidades, nos debería alegrar cualquier inversión que se produzca en Europa".
Preguntado por la competencia entre Estados miembros de la UE, indicó que "no es entre Alemania e Italia, es entre Europa, China y EEUU (pero) el sistema que hemos desarrollado en las últimas décadas mira sólo el mercado interno".
El objetivo de esa ayuda es ayudar a la construcción de una planta de producción de baterías para vehículos eléctricos para fomentar la transición hacia una economía neta de cero emisiones, conforme prevé el Pacto Verde europeo.
La ayuda ha sido autorizada sobre la base del marco temporal de crisis y transición de ayudas estatales, adoptado por la Comisión el 9 de marzo de 2023 y modificado el 20 de noviembre de 2023 para apoyar medidas en sectores esenciales para acelerar la transición ecológica y reducir la dependencia de los combustibles.
La empresa sueca elegirá Heide, en el norte de Alemania, para instalar su fábrica, tendrá una capacidad anual que ayudará a producir entre 800.000 a un millón de vehículos eléctricos al año, dependiendo del tamaño de la batería.
La planta comenzará a funcionar en 2026 y alcanzará la capacidad de producción total en 2029.
La ayuda alemana se concretará en una subvención directa de 700 millones euros y una garantía de 202 millones de euros.
Sin la ayuda, Northvolt instalaría la fábrica en Estados Unidos, donde se ha ofrecido apoyo, particularmente en virtud de la Ley de Reducción de la Inflación.
Northvolt, junto con Volkswagen, es la más avanzada de un puñado de empresas europeas que están allanando el camino hacia una industria de baterías propia, ya que una gran parte de la capacidad prevista en Europa será propiedad de empresas asiáticas.
Las subvenciones a Northvolt serán las primeras que concedería Alemania con cargo al nuevo "Marco Temporal de Crisis y Transición" europeo, adoptado en respuesta a la invasión rusa de Ucrania y ampliado este año para apoyar proyectos de transición ecológica.
EFE mb-lzu/cat/jlm