El Comité Técnico del Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER) divulgó las características y elementos que regirán los primeros cuatro Estándares de Competencia laboral para el sector logístico anunciados en julio por la Secretaría de Economía para fortalecer el capital humano e impulsar la competitividad del ecosistema logístico nacional.
Se trata de los Estándares de Competencia en:
- Integración de propuestas para servicios logísticos de comercio exterior
- Gestión operativa de servicios logísticos y transporte internacional de Comercio Exterior con base en el transporte terrestre: autotransporte y ferrocarril
- Gestión operativa de servicios logísticos y transporte internacional de Comercio Exterior con base en el transporte marítimo y aéreo
- Implementación del análisis geoespacial para fortalecer la seguridad logística en operaciones de comercio exterior
Los pormenores de los Estándares fueron divulgados en el Diario Oficial de la Federación el 24 de noviembre por el CONOCER, junto con otros 47 estándares avalados por su Comité Técnico para diversas competencias laborales.
Los relativos a las de logística en comercio exterior están orientados a elevar el nivel de especialización del capital humano y a dar a las empresas una base objetiva para evaluar y certificar las habilidades de su personal operativo y ejecutivo.
Pero ¿en qué consisten los cuatro Estándares de Competencia laboral para el sector logístico?
A) Integración de propuestas para servicios logísticos de comercio exterior
En un mercado donde los tiempos, la seguridad y el cumplimiento normativo condicionan la competitividad; la capacidad de integrar propuestas logísticas viables se ha convertido en una habilidad estratégica.
El Estándar evalúa a quienes proponen soluciones logísticas para clientes con operaciones de comercio exterior a partir de un análisis de sus necesidades. Su propósito es garantizar el diseño de alternativas, seleccionar proveedores idóneos y presentar una propuesta completa que sea técnicamente factible, económicamente competitiva y alineada con las políticas comerciales de la empresa que la ofrece.
Construcción de un estándar con visión de industria
Este estándar y, de hecho, en la mayoría de los estándares, son resultado de un proceso colaborativo entre organizaciones como la Asociación Mexicana de Agentes de Carga (Amacarga), la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), Cargo Rechy, HAF Logística Internacional, MP Logística 360, Valmik Logistics, entre otras; además de la Secretaría de Economía y la Unidad de Transferencia de Tecnología.
Esta diversidad garantiza que el estándar responda a la realidad del mercado, a las prácticas profesionales vigentes y a la complejidad de las operaciones multimodales que caracterizan al comercio exterior.
Una evaluación rigurosa y condiciones reales de desempeño
Según el documento oficial del CONOCER, la evaluación recomendada para este estándar debe realizarse preferentemente en el lugar de trabajo, aunque también puede desarrollarse en un espacio simulado siempre que existan los insumos necesarios.
El proceso dura cerca de dos horas, integrando 30 minutos de revisión documental y una 1.5 horas de ejecución práctica, apoyadas en herramientas como guías de trámites, manuales aduanales, formatos regulatorios y plataformas de gestión.
En la evaluación, el candidato deberá ser capaz de documentar una solicitud de servicios logísticos de manera completa, identificar la necesidad del cliente, analizar atributos técnicos de la mercancía, determinar rutas viables, seleccionar medios de transporte, revisar regulaciones aplicables y elaborar un modelo básico inicial de solución que sirva de base para la integración final.
También debe demostrar que puede articular la propuesta de manera clara y coherente, integrando criterios técnicos y comerciales.
Una estructura de cuatro elementos para ordenar la función profesional
El Estándar de Integración de propuestas para servicios logísticos de comercio exterior, considera cuatro elementos que ordenan de manera secuencial la función laboral que debe dominar la persona competente.
El primero es poder identificar las necesidades y requerimientos logísticos del cliente; el segundo elemento es poder identificar algunas de las opciones de solución planteadas y profundizar en la definición de la ruta elegida, la segmentación en tramos, entre otras.
El tercero se centra en la negociación con proveedores, la integración de tarifas y la consolidación del presupuesto total que dará sustento a la oferta. Y, el cuarto elemento: Integrar la propuesta de servicios logísticos de comercio exterior; es decir, se formaliza la propuesta, el plan de ruta, el diagrama de operación definitivo y los argumentos operativos y comerciales para presentarla al cliente.
En conjunto, este estándar formaliza una competencia clave dentro de la cadena logística: la capacidad de diseñar soluciones que sean al mismo tiempo viables, competitivas, seguras y rentables.
B) Gestión operativa del transporte internacional por autotransporte y ferrocarril
El transporte terrestre es el corazón logístico del comercio exterior mexicano. La mayoría de las mercancías que entran o salen del país transitan en algún momento por carretera o por ferrocarril, por lo que la coordinación operacional de ambos modos se ha convertido en una actividad estratégica para la competitividad nacional.
En este contexto, el Estándar de Competencia Gestión operativa de servicios logísticos y transporte internacional de Comercio Exterior con base en el transporte terrestre autotransporte y ferrocarril establece los parámetros que deben dominar quienes coordinan operaciones completas de exportación e importación desde la recepción de un proyecto autorizado hasta la entrega final de la carga en las condiciones pactadas.

Tiene como propósito certificar a las personas responsables de operar soluciones logísticas integradas que utilizan autotransporte y ferrocarril como medios de transporte internacional, garantizando que cada fase se ejecute conforme a requisitos contractuales, normativos y operativos previamente definidos.
En el documento se detalla que esta competencia inicia cuando el cliente acepta de manera formal una propuesta logística y concluye únicamente cuando la mercancía ha sido entregada, evaluada y administrativamente cerrada tal como se estableció con la empresa integradora del servicio.
La gestión implica, entre otras tareas, la coordinación con proveedores validados, la revisión de rutas y atributos del transporte, el seguimiento de maniobras y trámites aduanales, así como la verificación de tiempos, movimientos y requisitos regulatorios que rigen al autotransporte y al ferrocarril en México y en los mercados con los que se comercia.
Una evaluación práctica alineada con la realidad operativa
El proceso de evaluación replica condiciones reales de trabajo y puede llevarse a cabo en sitio o en un entorno simulado siempre que existan los recursos necesarios, incluyendo manuales aduanales, guías de trámites, plataformas de gestión, entre otros.
La duración total es de dos horas, dividida en 30 minutos de gabinete y 1.5 horas de ejecución práctica. Durante el proceso, la persona evaluada debe demostrar dominio de tareas asociadas al transporte internacional terrestre, incluyendo la validación de órdenes de servicio e identificar requerimientos técnicos, coordinar proveedores de autotransporte o ferrocarril, gestionar tarifas, verificar condiciones de seguro con base en el INCOTERM pactado, dar seguimiento a trámites aduanales, entre otros.
Una competencia estructurada en cuatro elementos esenciales
El Estándar de Competencia tiene cuatro elementos que describen la secuencia operativa completa. El primer elemento es validar los requerimientos, acciones y resultados contenidos en el servicio logístico y de transporte internacional integral.
Consiste en revisar la orden de servicio generada por el área de pricing, validar información contractual, identificar actores clave, confirmar rutas, tiempos y parámetros pactados.
El segundo elemento, Gestionar la operación integral del servicio logístico y de transporte internacional para el comercio exterior. Abarca la coordinación directa con proveedores elegidos y la identificación y gestión de medios de transporte adecuados.
El tercer elemento, Ejecutar la operación del servicio de logística y transporte internacional utilizando el autotransporte terrestre, describe las acciones relacionadas con unidades de carga carretera incluyendo coordinar recolecciones y entregas, revisar disponibilidad de operadores, entre otros.
El cuarto elemento, Ejecutar la operación del servicio de logística y transporte internacional utilizando el transporte ferroviario en modalidades de importación, exportación, intermodal, carga general, minerales o equipo sobredimensionado.
Una herramienta indispensable para una operación logística más confiable
Este Estándar de Competencia consolida un referente técnico para quienes operan la logística terrestre internacional.
Al definir con claridad qué debe saber y qué debe demostrar un profesional responsable de estas operaciones, el estándar contribuye a elevar la calidad del servicio, reduce riesgos y fortalece la confiabilidad de las cadenas de suministro que dependen del autotransporte y del ferrocarril para llegar a destinos globales.
C) Gestión operativa del transporte internacional marítimo y aéreo
El transporte marítimo y aéreo es el segmento más especializado del comercio exterior. En puertos y en aeropuertos, las maniobras, los tiempos y las regulaciones demandan decisiones rápidas y una coordinación que no admite errores.
En ese contexto, el Estándar de Competencia Gestión operativa de servicios logísticos y transporte internacional de comercio exterior con base en el transporte marítimo y aéreo establece los parámetros que deben cumplir quienes ejecutan operaciones a partir de un proyecto previamente aprobado por el cliente.

El objetivo es certificar a las personas que coordinarán la ejecución de la solución logística, verificando rutas, atributos del transporte, trámites aduaneros y cumplimiento normativo, hasta concluir con la entrega final de la mercancía según lo pactado.
La descripción del estándar detalla que la persona competente coordina proveedores previamente validados, supervisa maniobras portuarias y aeroportuarias, gestiona autorizaciones regulatorias, revisa restricciones no arancelarias y garantiza el cumplimiento de los términos del INCOTERM elegido.
Su función contribuye a la competitividad de las empresas al asegurar que la ejecución operativa se alinea con la solución previamente integrada y aceptada por el cliente.
Una evaluación que replica escenarios reales
La evaluación diseñada para este estándar se realiza en condiciones similares a una jornada laboral. Puede realizarse en un entorno operativo o en un escenario simulado con herramientas equivalentes, tales como manuales aduaneros, guías de Ventanilla Única, formatos oficiales, plataformas de gestión documental y cuestionarios técnicos.
El proceso total dura dos horas, divididas en 30 minutos de gabinete y 1.5 horas de actividades prácticas, en las que el evaluado debe demostrar su dominio de la normativa marítima y aérea, las maniobras portuarias y aeroportuarias, la documentación requerida y la interacción con proveedores clave como navieras y aerolíneas.
Un perfil estructurado en cuatro elementos clave
El estándar organiza la función operativa en cuatro elementos. El primero, Validar los requerimientos, acciones y resultados contenidos en el servicio integrado, implica revisar la orden de servicio, verificar contratos, confirmar la información técnica de la carga y abrir los canales de comunicación necesarios.
El segundo, Gestionar la operación integral del servicio logístico y de transporte internacional, abarca la coordinación con navieras, aerolíneas, agentes aduanales y operadores terrestres, además de gestionar reservas, tarifas, maniobras y regulaciones.
El tercer elemento, Ejecutar la operación del transporte internacional en modalidad aérea, se centra en la coordinación de carga y descarga en aeropuertos, la verificación del embalaje y la documentación aeronáutica, el monitoreo de vuelos y el cumplimiento específico de regulaciones aéreas.
El cuarto, Ejecutar la operación del transporte internacional en modalidad marítima, detalla la gestión de contenedores, la asignación de espacios en buques, la supervisión de maniobras portuarias, la trazabilidad en tránsito y la entrega final en destino.
Una referencia para fortalecer la competitividad logística
Este Estándar de Competencia consolida un marco esencial para quienes ejecutan operaciones marítimas y aéreas, funciones donde la precisión determina la continuidad de la cadena de suministro global.
Al definir criterios claros de competencia, el estándar impulsa una operación más profesional, confiable y alineada con las exigencias del comercio exterior moderno.
D) Implementación del análisis geoespacial para seguridad logística
En un entorno donde los riesgos al transporte de mercancías se han vuelto más sofisticados, el análisis geoespacial se ha convertido en una herramienta indispensable para anticipar incidentes, prevenir pérdidas y fortalecer la toma de decisiones.
El Estándar de Competencia Implementación del análisis geoespacial para fortalecer la seguridad logística en operaciones de comercio exterior reconoce esta necesidad y formaliza las habilidades requeridas para quienes analizan información espacial con fines de seguridad.
Su propósito es certificar a las personas capaces de integrar datos, procesarlos con metodologías geoespaciales y generar análisis que identifiquen patrones, zonas de riesgo y rutas vulnerables dentro de la cadena logística.

La descripción del estándar por parte de CONOCER establece que esta competencia abarca desde la definición de objetivos de investigación espacial hasta la evaluación de resultados, incorporando elementos como bases estadísticas, criminología ambiental, geolocalización, estructuración de bases de datos y teoría criminalística.
Se trata de una función especializada que ayuda a mitigar riesgos operativos en transporte, almacenamiento y tránsito de mercancías.
Un estándar desarrollado con expertos en seguridad, rastreo y logística
El estándar fue desarrollado por un grupo de organizaciones vinculadas con la seguridad logística y al análisis geoespacial como Analytica Geoespacial, la Asociación Nacional de Empresas de Rastreo y Protección Vehicular (ANERPV), además de la ANIERM, Trade Point México y la Secretaría de Economía y la Unidad de Transferencia de Tecnología.
Esta integración de visiones técnicas, comerciales y de seguridad permitió que el estándar consolidara criterios aplicables a escenarios reales, desde el análisis de robos en carreteras hasta la identificación de puntos críticos en rutas internacionales.
Una evaluación aplicada que requiere herramientas especializadas
El proceso de evaluación puede realizarse en el lugar de trabajo o en un ambiente simulado equipado con sistemas georreferenciados, equipos de cómputo con capacidad de procesamiento y herramientas de análisis geoespacial.
Su duración total es de dos horas: 30 minutos de gabinete y 1.5 horas de trabajo práctico, donde el candidato debe demostrar dominio en la obtención, preprocesamiento y análisis de datos espaciales, así como en la interpretación de patrones de riesgo y la elaboración de hallazgos útiles para la operación logística.
El estándar exige que la persona evaluada maneje con precisión bases estadísticas, técnicas de preoperación de datos y elementos de criminología ambiental que permitan entender fenómenos asociados al delito patrimonial de carga.
Un perfil dividido en cinco elementos para guiar la investigación espacial
El estándar tiene cinco elementos clave. El primero, Definir los objetivos de la investigación espacial, establece el alcance del estudio y los criterios necesarios para orientar la obtención de datos.
El segundo, Obtener los datos espaciales, implica reunir información proveniente de sistemas de rastreo, bases públicas, fuentes oficiales y registros operativos. El tercer elemento, Aplicar las herramientas de preprocesamiento de datos, consiste en limpiar, ordenar y estructurar la información para su análisis.
El cuarto elemento, Realizar el proceso de análisis y la investigación metodológica geoespacial, aborda la etapa central, identificar patrones, zonas de riesgo, correlaciones y tendencias mediante el uso de herramientas georreferenciadas.
Finalmente, el quinto elemento, Evaluar los resultados del análisis espacial, integra los hallazgos en reportes que puedan utilizarse para mitigar riesgos, ajustar rutas, reforzar protocolos de seguridad o tomar decisiones preventivas.
Una herramienta para anticipar riesgos y proteger mercancías
En un país donde el transporte de carga enfrenta desafíos crecientes, este estándar de competencia representa un paso decisivo hacia la profesionalización del análisis geoespacial en logística.
Al establecer criterios claros sobre cómo obtener, procesar y analizar información espacial, el estándar dota a las empresas de un recurso técnico fundamental para blindar sus operaciones y proteger la cadena de suministro frente a amenazas emergentes.













