La digitalización y los cambios en los hábitos de consumo son dos de los principales factores que han impulsado al e-commerce a tener un crecimiento exponencial en los últimos años.
Para dimensionar: En 2020 cerca del 90% de la población mundial admitió haber comprado en internet, razón por la cual los ingresos procedentes de las ventas online se ubicaron en aproximadamente 4.2 billones de dólares. Esto de acuerdo con Statista.
En este mismo sentido, eMarketer, empresa de investigación de mercado, estima que las ventas de comercio electrónico superarán 6.8 billones de dólares para 2025.
Sin embargo, iniciar y establizar un negocio en este sector no es una tarea sencilla debido a diversas barreras de entrada que pueden dificultar la incursión y, sobre todo, la permanencia de nuevas empresas.
Las nuevas empresas y emprendedores enfrentan múltiples desafíos que pueden dificultar su sostenibilidad a largo plazo. Desde aspectos tecnológicos hasta barreras logísticas y regulatorias, es fundamental conocer los principales obstáculos para poder diseñar estrategias adecuadas y asegurar el éxito en el entorno digital.
Recientemente la agencia Full Digital Commerce Elogia presentó el estudio de E-commerce en México 2025, en el que los expertos en comercio electrónico identificaron algunas de las principales barreras de entrada en el sector.

Barreras de entrada para el e-commerce
Ante la pregunta sobre cuáles son las barreras más relevantes que se han encontrado o se han encontrado sus clientes a la hora de montar un e-commerce, los expertos encuestados para este estudio respondieron:
- Problemas logísticos (con un 44%)
- Falta de presupuesto (con un 42%)
- Barreras tecnológicas (con un 40%)
- Problemas estratégicos (con un 38%)
- Cómo medir retorno de la inversión y monitorización de las transacciones (con un 36%)
- Falta de presupuesto para una vez lanzado llevar las operaciones (con un 35%)
- Falta de recursos humanos (con un 27%)
- Conflicto de canales on-off (con un 20%
- Barreras con el equipo interno (con un 18%)
La gestión de la logística, como puede apreciarse en el estudio, se coloca como uno de los mayores retos del e-commerce.
Factores como el almacenamiento, la distribución eficiente, los tiempos de entrega y la gestión de devoluciones pueden representar barreras significativas.
Las nuevas empresas o empresas emergentes deben competir con grandes plataformas que cuentan con infraestructuras logísticas optimizadas, lo que dificulta ofrecer servicios similares sin incurrir en costos elevados.
Además, hay que agregar, en algunos casos, la falta de acuerdos estratégicos con proveedores de transporte que puede afectar la rentabilidad y satisfacción del cliente.

En segundo lugar, la falta de presupuesto requiere una inversión inicial considerable en aspectos como desarrollo de plataformas digitales, estrategias de marketing, adquisición de inventario y cumplimiento de regulaciones.
Muchas de las pequeñas empresas enfrentan dificultades para acceder a financiamiento o generar ingresos suficientes en sus primeras etapas.
Ahora, el uso de tecnología avanzada es clave para el éxito en el comercio electrónico, pero también representa un desafío significativo.
Implementar plataformas seguras y eficientes, optimizar la experiencia del usuario y garantizar integraciones con sistemas de pago y logística puede ser complejo y costoso.
Además, mantenerse actualizado con tendencias como inteligencia artificial, análisis de datos y automatización requiere conocimientos técnicos y recursos adicionales que no todas las empresas pueden permitirse.