Walmart se asoció con Unspun, una empresa de tecnología de la moda, para poner en marcha un proyecto piloto que explora una tecnología de tejido en 3D para producir prendas de vestir.
La iniciativa pretende responder a las preocupaciones medioambientales de la industria de la confección, señaló la empresa retail en un comunicado.
Ambas firmas tienen el interés de abordar de manera ecológica el manejo de los residuos y abonar a una mayor fabricación textil en Estados Unidos.
Mientras que los métodos tradicionales de producción de prendas de vestir requieren que la tela sea cortada y cosida, la tecnología de tejido 3D va directamente del hilo a la prenda.
Así, elimina los desechos generados por el proceso, como la pérdida de tela, el inventario desechado y emisiones del transporte.
El objetivo es tener máquinas de tejer 3D en micrositios en todo Estados Unidos, con el objetivo de tener 350 máquinas en uso para 2030.
El proyecto piloto se concentrará en producir pantalones de trabajo.
Industria textil, un sector tradicionalista
La cofundadora y directora de Unspun, Beth Esponnette, remarcó que la industria textil ha cambiado muy poco a lo largo de los años en la forma de producir ropa.
El hilo forma una tela plana que se corta según un patrón y se cose, desperdiciando el exceso de material, en un ciclo de varios pasos que se lleva a cabo en todo el mundo.
Dicho modelo de cortar y coser también requiere que las empresas tengan un exceso de inventario debido a que la producción depende de la demanda de los consumidores y las tendencias en constante cambio, lo que genera un flujo constante de desperdicio.
A primera vista, los tejidos en 3D no se verán diferentes de un par fabricado tradicionalmente, pero no habrá costuras en las piernas, lo que lo convertirá en un producto más resistente y liviano.
Además, las etiquetas se tejerán en la prenda en lugar de coserse, lo que creará mayor comodidad.
El modelo bajo demanda también permitirá una posible personalización y acerca el proceso de fabricación mucho más a casa a través de la producción localizada.
“Creemos que si podemos pensar en la próxima generación de prendas de vestir y construir un proceso que sea mucho más automatizado y permita la fabricación bajo demanda, podemos permitir que una industria que, más o menos, ha abandonado los Estados Unidos, regrese”, dijo Kevin Martin, cofundador y director de tecnología de la marca.
Reimaginando el futuro del comercio minorista
Luchar contra este flujo de residuos en la industria de la confección es un desafío global importante que la firma pretende abordar con el gigante minorista.
En 2023, la marca anunció un proyecto piloto con Rubi Laboratories para explorar la incorporación de su proceso de captura de carbono, pendiente de patente, en la cadena de suministro.
Con esa tecnología pretenden convertir las emisiones de carbono en hilo utilizado en un prototipo de prenda.
La apuesta de sostenibilidad de Walmart va más allá de la industria textil.
La firma ha trabajado junto con proveedores, ONG y líderes de acción climática para inspirar cambios positivos en las cadenas de valor globales desde 2005.
Tiene el objetivo de utilizar energía renovable en un 50% en operaciones propias para el 2025 y el 100% para 2035.