Las organizaciones utilizan inteligencia artificial (IA) para optimizar el control de calidad: hasta 45% de CIOs y otros profesionistas senior de TI afirma que está usando automatización inteligente y 57% está experimentando nuevos enfoques en pruebas de aplicaciones inteligentes, incluyendo IA y aprendizaje automático, indica el World Quality Report (WQR) 2018 de la consultora Capgemini.
Adicionalmente, 59% de los negocios citan que están propensos a enfocarse en analíticos predictivos en el 2019, mientras que 54% está interesado en RPA (Robotic Process Automation) y 36% en aprendizaje automático, refiere el estudio de Sogeti en conjunto con Micro Focus.
“Por primera vez los profesionales de TI han valorado a la experiencia del cliente como la principal prioridad de sus actividades de control de calidad (QA). Este reporte también destaca la convergencia de la IA, el aprendizaje automático, los analíticos y su uso para habilitar la automatización inteligente como la principal fuerza disruptiva para impulsar la transformación en QA y testing en los próximos dos a tres años”.
Así, asegurar la satisfacción del usuario final es la principal prioridad de este sector, seguido por el interés en detectar defectos de software antes del lanzamiento a producción y después por la intención de incrementar la calidad del software o producto, según las evaluaciones que midieron la importancia en la tarea QA/testing a través de las opiniones de mil 700 CIOs y otros profesionales senior de TI de 10 industrias de 32 países.
Brad Little, Executive Vice President, Global Head of Application Services de Capgemini, comentó que el control de calidad ya no es una función de back-office, es una actividad crítica que afecta directamente la experiencia del cliente y que el reporte de este año demuestra que los profesionales TI están más conscientes que nunca de esto.
“Los equipos TI deben incrementar sus habilidades rápidamente y adoptar nuevas tecnologías en un futuro cercano, si desean mantenerse al ritmo del ambiente de transformación, liderado por la IA y la automatización”, señaló el directivo.
El WQR 2018 explica que existe un reto para acceder a las habilidades especializadas requeridas en el nuevo ambiente tecnológico, pues más de un tercio (36%) de los encuestados piensa que faltan habilidades en los profesionales que ahora necesitan un entendimiento adecuado de las implicaciones de IA en los procesos de negocio; y 31% siente que no está equipado suficientemente con las habilidades de ciencias de datos requeridas.
Al respecto, Little agregó que la deficiencia de habilidades es un gran obstáculo que las empresas deberán sobrepasar: Trabajar con IA requiere profesionales con un amplio rango de competencias, como conocimiento algorítmico, optimización matemática e inteligencia de negocio. El departamento de TI del mañana tendrá mucho más científicos de datos, expertos en IA y estrategas.
En este sentido, el enfoque en la satisfacción del usuario final refleja la importancia de otras prioridades de negocio, como la velocidad de lanzamiento al mercado, la competitividad e innovación, exhibió el reporte.
Dicha perspectiva impulsa intentos de procesar enormes cantidades de datos estructurados y no estructurados dentro de los límites de prácticas razonables. Asimismo muestra un cambio de enfoque, como progresión definida de los esfuerzos tempranos en la experiencia multicanal, demuestra el mismo estudio.
Finalmente, Raffi Margaliot, Senior Vice President and General Manager, Application Delivery Management de Micro Focus comentó que los clientes esperan interactuar con los negocios en plataformas tecnológicas complejas, a través de múltiples dispositivos, haciendo de la experiencia de usuario transparente un aspecto crítico de ese viaje.
“Con mayor experimentación en IA, analíticos e internet de las cosas (IoT), las organizaciones deben enfocarse rápidamente en el desarrollo de las habilidades especializadas de sus equipos de testing para adaptarse a un ambiente tecnológico avanzado”.