De forma constante, las exigencias sobre la planificación y el desarrollo de las operaciones logísticas se centran en alcanzar mayores niveles de calidad, eficiencia y eficacia, todo ello, sin considerar los escollos que, día a día tanto operadores como dadores de carga deben sortear.
Pero no se trata sólo de responder siempre de forma satisfactoria a estas premisas, sino que también –sea por estacionalidad o por las particularidades de los productos y la urgencia en su reposición- sino de hacerlo también ante urgencias y momentos críticos. Frente a ello, es inevitable hablar de flexibilidad y Agile Supply Chains.
Durante el Seminario Internacional de Management Logístico, a realizarse el 12 de noviembre en Buenos Aires, se abordará esta temática, de la mano del profesor de Marketing y Logística, y director del Centre for Logistics and Supply Chain Management en la Universidad de Cranfield, Martin Christopher.
Mientras el grueso de los modelos de gestión refieren a momentos de calma en los flujos de productos, este paradigma refiere a situaciones que, por un motivo u otro, se vuelven casi permanentes, en especial en los países del Cono Sur, como son los momentos de crisis en las operaciones logísticas.
Claves para el cambio
En el marco del International Logistic Summit México 2009* –evento organizado por Revistas Énfasis- el 18 y 19 de marzo en la ciudad de México, diversos speakers analizaron diferentes estrategias de Management y motivaron al sector logístico a adoptar variadas herramientas de gestión en sus operaciones.
En ese contexto, Martin Christopher debatió sobre la agilidad como concepto de cambio, y la necesidad de convertir la cadena de suministro en una cadena de demanda, con base en la velocidad como esencia de los procesos.
En su conferencia “Agile Supply Chains”, Christopher mencionó como ejemplo de este nuevo modelo de negocios a las 10 principales cadenas de suministro de acuerdo con AMR Research: Apple, Nokia, Dell, Procter & Gamble, IBM, Wal Mart, Toyota, Cisco, Samsung y Anheuser-Busch.
El catedrático explicó que una logística esbelta no garantiza agilidad, y argumentó que, mientras la primera es una excelente opción para el manejo de productos con poca variedad y baja variabilidad de demanda, una logística ágil es mejor alternativa para entornos menos predecibles y con alta demanda por variedad.
“La gestión basada en pronósticos ya no es viable: se debe anticipar la capacidad y ejecutar las medidas en función de la demanda”, sostuvo Christopher, al tiempo que identificó las claves para sostener una cadena de suministro ágil: alineación de procesos, red de distribución, sensibilidad hacia el mercado y gestión virtual.
En base a ese modelo, el profesor enumeró siete pasos para la gestión de una cadena de suministro ágil:
- sustituir inventarios por información;
- trabajar con mayor inteligencia (en términos de eliminar actividades que no agregan valor);
- asociarse con proveedores para reducir tiempos de procesamiento de órdenes;
- disminuir la complejidad (sin que necesariamente implique disminuir la variedad);
- integrar el concepto de postponement;
- gestionar los procesos (evitar el enfoque único en funciones), y
- usar indicadores adecuados.
Analizar la demanda en mercados volátiles
Durante el evento, el director del Centre for Logistics and Supply Chain Management de la Universidad de Cranfield dialogó en Énfasis Logística y remarcó la necesidad de establecer nuevos parámetros de análisis y pronósticos, contemplando la variabilidad de los mercados.
Énfasis Logística: ¿Cuál es el argumento acerca de lo fundamental que en tiempos actuales resulta ser la agilidad en la cadena de suministro?
Martin Christopher: La principal razón por la cual la agilidad de la cadena de suministro es tan crucial hoy es porque la mayoría de los mercados se han vuelto más turbulentos y volátiles y -por lo tanto- menos predecibles. De tal manera que las compañías necesitan hacer la transición de enfoque con base en pronósticos a enfoque con base en demanda. Para hacer que esto suceda se requiere un gran enfoque dentro del negocio en la reducción de la complejidad y en la mejora de los procesos.
É. Logística: ¿Qué factores inciden en la complejidad que hoy presentan las cadenas de suministro de muchas compañías?
M. Christopher: La mayoría de las cadenas de suministro de las compañías se han vuelto más complejas como resultado varios factores, como pueden ser la ampliación de su línea de productos, la incorporación de productos más complicados con más largas cuentas de materiales, así como el hecho de que los tiempos de respuesta son más lentos, debido al suministro desde otros países.
É. Logística: ¿Cuál es su consejo para brindar mayor agilidad a las operaciones logísticas?
M. Christopher: Con el fin de hacer las cadenas de suministro más ágiles, las compañías necesitan revisar su estrategia de compra y suministro, y trabajar más de cerca con sus proveedores clave para reducir los tiempos de ciclo inbound.