La refinería en Dos Bocas, Tabasco, de PEMEX, impulsará la disponibilidad de infraestructura para el almacenamiento y transporte de productos en México, asimismo, permitirá incrementar la producción de gasolina y diésel para apoyar la movilidad del parque vehicular del país.
También impulsará el desarrollo regional, la disponibilidad de crudo, el arribo de ductos marinos y permitirá la instalación para cabotaje y la salida de productos por otros medios hacia el resto del país y del mundo, mencionó la Secretaría de Energía (SENER).
La refinería tendrá una capacidad de procesamiento de 340 mil barriles por día, manejará un crudo de 22ºAPI y tendrá una tecnología de alta eficiencia energética, dijo Norma Rocío Nahle García, titular de la dependencia, en la presentación del Plan nacional de refinación en Tabasco.
El área de construcción abarca 566 hectáreas de terreno y la localización permite que lleguen los ductos de petróleo y la materia prima proveniente del litoral de Tabasco y la sonda de Campeche, donde se extrae el 80% de los hidrocarburos del país.
Dos Bocas, en el puerto petrolero, traerá beneficios principalmente a Tabasco, Campeche y Veracruz, lo que promoverá el dinamismo monetario, la demanda de bienes y servicios, la oferta de equipamiento público y privado.
Petróleos Mexicanos (PEMEX) importó un volumen promedio de 594 mil 300 barriles diarios de gasolinas al cierre de noviembre del 2018, la cifra más alta en cinco años. Sin embargo, produjo 192 mil barriles diarios, una cantidad bajas.
La importación de gasolinas en 2017 fue de 570 mil 600 barriles diarios.
Pemex es el principal proveedor de gasolinas en el mercado nacional, distribuye 95% del volumen total, pero más de 80% es importada. En México están registradas más de 12 mil estaciones de despacho de combustibles bajo diversas marcas privadas y en el formato de franquicia PEMEX.