Las Zonas Económicas Especiales (ZEE) de México son un ejemplo de planeación a mediano plazo, ya que se busca que tengan un manejo sustentable y eficiente de los recursos, por lo que es necesario contar con un sistema de planeación de infraestructura y privilegiar a las empresas nacionales, ya que la infraestructura también es un tema de seguridad nacional, como es el caso de obra hidráulica, señalaron expertos durante el Foro OCDE México 2018, Un futuro con crecimiento e inclusión, realizado en la Ciudad de México.
Gerardo Gutiérrez Candiani, Titular de la Autoridad Federal para el Desarrollo de las ZEE, señaló que las zonas y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) comparten tres enfoques: primero, están en favor de políticas de crecimiento urbano ordenado; segundo, promueven la coordinación entre los tres niveles de gobierno; y tercero, impulsan el desarrollo de infraestructura urbana y social.
En su intervención en el panel Impulsar el despegue de la infraestructura para el desarrollo, explicó que las áreas de influencia de las ZEE son diseñadas con base en la metodología del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en su programa Ciudades emergentes y sostenibles que se fundamenta en la sustentabilidad del medio ambiente a través de un aprovechamiento sustentable de los recursos naturales; la sustentabilidad urbana, fiscal y gobernabilidad y competitividad, a fin de reconocer las ventajas de cada región para atraer inversiones y generar empleos.
“Las Zonas Económicas Especiales son un gran ejemplo de lo que es la planeación de un país con una visión compartida entre el sector público y privado para impulsar políticas públicas transversales y enfocadas en los 10 estados con mayores rezagos”, expresó Gutiérrez Candiani.
Por su parte, Sergio Alcocer, Presidente Fundador de México Exponencial y coordinador de Política Pública de Latinoamericana, coincidió en que estas zonas son un ejemplo de planeación a mediano plazo, asimismo, advirtió que es necesario contar con un sistema de planeación de infraestructura y privilegiar a las empresas nacionales ya que la infraestructura también es un tema de seguridad nacional, como es el caso de obra hidráulica.
Janos Bertok, Jefe de la División de Integridad en el Sector Público de la OCDE, acotó que la infraestructura de un país es parte de la transformación económica, ya que permite un manejo sustentable y eficiente de los recursos y es también, un desafío para la gobernabilidad, refirió la Autoridad Federal para el Desarrollo de las ZEE en un comunicado.
En tanto, María Elena Estavillo, Comisionada del Instituto Federal de Telecomunicaciones, mencionó que la infraestructura es base del desarrollo y se requiere trabajar en coordinación con los gobiernos estatales, municipales e incluso coordinar políticas entre distintas instituciones federales para superar el rezago que prevalece al respecto.
Y ejemplificó la desigualdad que prevalece en el país respecto al acceso a internet, pues mientras en la Ciudad de México 82 de cada 100 hogares cuentan con acceso a internet, el promedio nacional es de 43 hogares. Sin embargo, en estados como Oaxaca sólo 18 hogares disponen de conexión a internet y en Chiapas apenas 13, destacó Estavillo.