Para Oscar Romero, Director de Ventas para México y el Norte de América Latina de Infor, el único factor estable para las empresas de manufactura, los fabricantes y proveedores es la velocidad de los cambios, por lo que el servicio post venta es una forma de aumentar la facturación por medio de la relación con los clientes, además, las empresas pueden focalizarse en servicios de valor agregado que se extienden más allá del producto inicial y de la instalación, y continúan durante la vida de la maquinaria.
Indicó que al enfrentar ese mercado volátil, las manufactureras, fabricantes y proveedores pueden intentar ignorar la incertidumbre o ser agresivos en sus estrategias para dominar los cambios y transformarlos en oportunidades, no obstante, “por medio de procesos integrados junto con la capacidad de relevar continuamente y mejorar los diseños de los productos, las compañías pueden lograr eficiencia, calidad de producto y servicio atento”.
En este contexto, el directivo consideró que el foco en el sector de manufactura, los programas de capacitación y la promesa de proyectos de ingeniería en el sector público crean un escenario optimista pero todavía incierto. Por ello, los costos, las reglamentaciones y restricciones suman presión a las empresas al planificar para el futuro y, aunque cuentan con varias opciones para responder a esta volatilidad, la mayoría son de alto riesgo.
Además, ignorar las nuevas tendencias y la tecnología deja a las compañías muy vulnerables, la competencia que es muy agresiva con su market share y desea conquistar clientes rápidamente puede, enseguida, superar a las empresas lentas con las innovaciones. Entonces, la empresa que sea ágil, flexible, que se adapte a los cambios y esté dispuesta a realizar cambios hacia nuevas oportunidades sobrevivirá fácilmente y será exitosa aun en épocas de volatilidad.
“Para seguir siendo relevante y aprovechar las oportunidades del mercado, las organizaciones deben ser estratégicas respecto a sus operaciones, su cadena de suministro y su capacidad de focalizarse en las necesidades de los clientes, cualquiera sea su ubicación”.
Romero comentó que “nos encontramos en una economía global con un gran potencial de crecimiento económico, siempre que las compañías estén equipadas con un software de vanguardia. Para aquellos que aun cuentan con tecnología antigua y dudan de realizar una actualización, el crecimiento será muy cuesta arriba.
“Las aplicaciones tecnológicas modernas y avanzadas ayudarán a las organizaciones a enfrentar las complejidades y transformar la volatilidad en tiempo de crecimiento, como las que se centran en el cliente”, comentó y agregó algunas con las cuales se ayuda a las corporaciones a crecer. Es el caso del business intelligence y análisis predictivo, que permiten anticipar tendencias, aplicar la ciencia de datos para pronosticar necesidades de recursos y descubrir potenciales oportunidades de ventas, ya sea con clientes existentes o nuevos mercados.
También la implementación en la nube significa agilidad, lo que permite a las empresas expandir sus sucursales, crear alianzas, fusionar y adquirir otras empresas, así como ampliar el portafolio de productos sin la presión de comprar e instalar nuevo hardware, servidores y seguridad. Esto es responsabilidad de otro y la implementación toma semanas y no años, aclaró el vocero.
Mientras que la implementación en la nube con capacidad de almacenaje elástico y las soluciones ERP modernas con arquitectura flexible permiten contar con nueva tecnología como disrupción digital, realidad virtual (VR) e internet de las cosas. “La actualización de la infraestructura de TI es un elemento esencial para la implementación de soluciones innovadoras para el piso de planta, como también para la gestión de la cadena y para el servicio post venta.
“Mantenerse al ritmo de la velocidad de los cambios requiere un software que no tenga modificaciones pesadas que dificulte las actualizaciones y la expansión”, afirmó el director de ventas para México y el Norte de América Latina de Infor.
Otra anotación fue la referente a tener productos altamente configurados como Engineer-to-Order (ETO), Make-to-Order (MTO), ya que los clientes demandan productos sumamente customizados: Esta complejidad debe optimizarse para minimizar los desperdicios y optimizar la productividad del personal. El control de calidad, el cumplimiento de normas y la logística de terceros también debe gestionarse, pues la visibilidad de toda la organización es vital.