Al anunciar en detalle los objetivos del organismo durante su gestión, el nuevo Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), Carlos García Fernández, definió como meta fundamental dotar de mayor empuje al programa de chatarrización con el fin de renovar la flota vehicular mexicana, cuyo promedio de vida actual es de 17 años.
La idea —explicó— es adoptar de manera tropicalizada las mejores prácticas en este asunto, por lo cual una delegación del organismo visitará España, país que ha logrado ser exitoso el tema.
Cuatro objetivos más están en sus planes de acción: impulsar la competitividad del sector, generar un programa realista para modernizar el parque vehicular, propugnar por la aplicación eficaz de las normas mexicanas en materia de autotransporte y relanzar Expo Transporte en el 2010.
Al hacer un recuento de cifras de negocio del gremio, García Fernández pronosticó un decrecimiento de 50% en ventas en el mercado doméstico al cierre de este año. Mientras que en cuanto a las exportaciones, la ANPACT estima una reducción de 20%. Sin embargo, con un enfoque positivo, el Presidente expresó que “la industria tiene muy fuertes raíces, por lo que saldrá del bache”.
Argumentando su postura, informó que varias empresas agremiadas (no mencionó cuáles) se comprometieron a invertir en este año, iniciativa que permitirá amortiguar la problemática; además de que —complementó— no se han cerrado agencias distribuidoras, e incluso se han inaugurado varias.
Asimismo, dijo que en los primeros meses de 2009 la contracción de esta industria mexicana alcanzó la cifra de 14%, y agregó que en los siguientes meses se espera será de 6%. Estos indicadores, manifestó, sugieren una mejoría del sector al final del año.
Uno de los asuntos que más preocupó a la anterior administración de la ANPACT fue la entrada de vehículos usados al país. Las cifras que el nuevo Presidente dio a conocer en cuanto a importación de unidades usadas señalan un descenso notorio entre marzo y abril en cuanto a tractocamiones (de 316 a 62), camiones de 5 a 20 toneladas a diesel (de 52 a 29) y camiones de más de 20 toneladas a diesel (de 12 a 4).
Sobre estos indicadores, Carlos García comentó a Énfasis Logística que la entrada de vehículos usados se redujo a partir del acuerdo dado a conocer el 24 de marzo por el gobierno federal (en el cual se establecen lineamientos para importar aquellos vehículos pesados que no afecten al medio ambiente); sin embargo estos días —añadió— el consejo directivo estará analizando el tema para definir las acciones a tomar en esta materia.