El video y las soluciones de analítica de datos son algunas de las herramientas tecnológicas que están ayudando a mitigar y prevenir los problemas de seguridad privada y urbana en México, “para temas de alto impacto como el robo de vehículos, asaltos y secuestros, son tecnologías que pueden ayudar desde la prevención, control o reacción”, aseguró Roberto De La Mora, Director de Mercadotecnia y Nuevos Negocios de ho1a, durante la gira de “El Sabor de las TI” en Monterrey, Nuevo León.
De la Mora explicó que cada vez más las organizaciones y el sector público adoptan este tipo de tecnologías para ofrecer servicios inteligentes, así como para dar respuestas más eficientes y rápidas a los problemas de seguridad que aquejan a distintas ciudades y municipios de México. El video, particularmente el video sobre IP, se ha convertido en el sensor por excelencia para prevenir, acotar, reconocer, mitigar y documentar los eventos que atentan contra la seguridad de las personas y los activos de las empresas en los sitios que representen más riesgo.
Estados como Tamaulipas, Estado de México, Michoacán y la Ciudad de México, fueron identificados como sitios de alto riesgo según se detalla en el Informe de Seguridad Empresarial en México: retos y tendencias 2015-2016, elaborado por la American Chamber México, pero en general las condiciones de inseguridad sobre personas y activos se encuentran presentes en todos los ámbitos del país, refirió en el citado evento sobre las últimas tendencias de tecnología para organizaciones e impacto en los negocios.
Citado en un boletín de ho1a, el directivo agregó que estos sistemas, integrados con plataformas de análisis de datos no estructurados, crean soluciones integrales de seguridad que no solo permiten monitorear la actividad del momento, también proveen la inteligencia necesaria para correlacionar eventos, producir evidencia de los hechos, responder rápidamente ante amenazas e inclusive predecir condiciones de riesgo y atacar estas antes de que se conviertan en un incidente grave.
Asimismo, mencionó que datos de la Secretaría de Seguridad Pública del municipio de San Pedro Garza García en Nuevo León, indican que con el uso de la tecnología, principalmente de cámaras de vigilancia, se han disminuido 17% los robos en los últimos tres años; actualmente siete de cada diez detenciones se realizan gracias a la información que brindan las 1.200 cámaras que tiene el municipio.
Actualmente, los nuevos dispositivos de video, conectados al internet, permiten de manera precisa, confiable e intuitiva, crear “reglas de negocio” para reconocer automáticamente eventos inseguros y disparar acciones de mitigación o respuesta sin la intervención directa de una persona. “Hoy en día, por ejemplo, la atención de un operador de dos cámaras es de 22 minutos, después de ese lapso su atención disminuye 95%. Se calcula que estos operadores pueden revisar hasta 900 millones de eventos al mes. En ese sentido el sector público puede apoyarse de la tecnología para responder a la demanda de los sucesos de seguridad pública”, dijo el directivo.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública de México, en nuestro país hay 23 mil 500 cámaras de videovigilancia en manos de instituciones de seguridad, para las cuales se destinó una inversión de mil 369 millones de pesos para su instalación. Se calcula que en México las ventas de equipos de videovigilancia han crecido en los últimos cinco años alrededor de 60%, y que al menos ocho de cada diez mexicanos consideran que este tipo de tecnología es efectiva para hacer frente al clima de seguridad que se vive, finalizó el documento.