La cadena de frío es un eslabón fundamental para garantizar la calidad y seguridad de los productos perecederos, por esto los contenedores refrigerados son herramientas esenciales para mantener la temperatura adecuada durante el transporte y almacenamiento, desde el campo hasta el consumidor final.
Las innovaciones recientes se centran en mejorar la eficiencia energética y en controlar la atmósfera para mantener los productos frescos durante su transporte.
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Tecnologías de vanguardia en contenedores refrigerados
Los contenedores refrigerados modernos incorporan tecnologías de vanguardia que permiten un control preciso de la temperatura en tiempo real como:
- Sensores inteligentes monitorean continuamente las condiciones dentro del contenedor, enviando datos a un sistema centralizado para su análisis y control, permite a los operadores ajustar la temperatura de manera remota, adaptándola a las necesidades específicas de la carga.
- Sistemas que incorporan algoritmos predictivos que anticipan cambios de temperatura y ajustan automáticamente la refrigeración para mantener una temperatura constante.
En tal sentido, las tarifas del transporte de contenedores refrigerados han fluctuado, con un aumento significativo en 2023 debido a factores como el desvío de buques y el exceso de capacidad de portacontenedores, sin embargo, se espera que estas tarifas disminuyan a medida que el comercio se adapte a estas condiciones
Beneficios de los contenedores refrigerados
- Mayor precisión y control: La temperatura se mantiene dentro de rangos estrechos, reduciendo el riesgo de deterioro de la carga.
- Mayor eficiencia energética: El ajuste automático de la refrigeración reduce el consumo de energía.
- Monitoreo remoto: Se puede acceder a la información sobre la temperatura y la humedad en cualquier momento y desde cualquier lugar.
Los materiales utilizados en la construcción de contenedores refrigerados también están evolucionando, paneles aislantes de última generación ofrecen una mayor eficiencia térmica, reduciendo la pérdida de calor y manteniendo la temperatura interna estable.
Además, los materiales compuestos ligeros y resistentes a la corrosión ofrecen una mayor durabilidad y reducen el peso total del contenedor, lo que se traduce en un menor consumo de combustible durante el transporte.