La equidad de género, la brecha salarial entre hombre y mujeres o el desarrollo de grupos minoritarios dentro de las empresas está dominando la conversación en distintos ámbitos en todo el mundo.
El sector logístico no es la excepción, sobre todo porque poco a poco las mujeres han conquistado un área que históricamente involucraba sólo a hombres.
Por esa razón, mujeres líderes de la cadena de suministro debatieron ideas al respecto en el webinar How Women Leaders are Raising Supply Chains to New Heights.
Organizado por el Council of Supply Chain Management Professionals (CSCMP), el grupo puntualizó los retos de ser una mujer líder en estos tiempos.
No perder nunca el espíritu curioso
“A menudos nos ven como la sombra de alguien o como una asistente y entendí que debía entablar mis propias relaciones y poder alzar la voz para encontrar un camino propio y que no solo me conocieran como una comparsa”, señaló Sara Schepman, Vicepresidenta de Logística Global de Bath & Body Works.
Dijo que las mujeres tienen que ganarse los puestos: “llámenos competitivas, valientes o curiosas por lo que vendrá. Tomé algunos de los desafíos de mi carrera y los convertí en oportunidades de crecimiento. Tenemos que conquistar espacios”.
Añadió que en su empresa ha vivido muchos momentos, desde fusiones, adquisiciones y separaciones, y ha aprendido de todas ellas, sobre todo a salir de su burbuja personal.
“Creo que se trata de mantener la curiosidad, de retarnos, probar cosas diferentes. Tengo 25 años en la logística y vi a mujeres que no querían salir de esos roles que por años se nos asignaron, porque según ellos no podíamos hacer otra cosa. Debemos ir más allá, incluso cuando no es incómodo”, remarcó.
Más mujeres audaces
Amanda Lovelace-Tobicash, la directora senior de Operaciones y Fulfillment de Target Global Supply Chain & Logistic, enfatizó que en estos tiempos las mujeres deben ser audaces.
“Muchas vivimos el llamado Síndrome del Impostor, porque no nos creemos capaces de desarrollar el puesto en el que estamos o la responsabilidad que se nos encomienda. Y ayuda mucho interactuar con otras mujeres y saber que pasan las mismas o más dificultades que tú para hacer el trabajo. Hay que retroalimentarnos para pensar en soluciones”, abundó.
Resaltó que habrá momentos en que los compañeros o ciertas situaciones les harán sentir incómodas, pero antes de tomar una decisión a ligera es sensato preguntarse los porqués del comentario. De quién vienen y por qué se dan.
“Como mujer a veces dejas que pensamientos intrusivos te afecten, porque solemos exagerar la empatía, pero precisamente hay que darse un respiro y pensar”, indicó.
Retroalimentación entre mujeres... y hombres
Aimee Tierney, Vicepresidenta y Gerente General de SAP Norteamérica y Encargada de la Cadena de Suministro Digital de Medioeste, comentó que ante esa necesidad urgente de sororidad es que promovió la creación una Red de Mujeres Empresarias.
“Es una comunidad global que se centra en el entrenamiento y la tutoría, lo que brinda oportunidades de colaboración conjunta con socios, así como oportunidades filantrópicas. Las mujeres en la cadena de suministro son parte de nuestros principales objetivos”, explicó.
Y no se trata de un organismo sólo de mujeres, por el contrario, de lo que se trata es que haya una interacción y entendimiento por parte de los hombres, por lo que la red igual conjunta al sexo masculino para promover diferentes formas de trabajo.
Remarcó que parte de su exitosa carrera se la debe a grandes mentores: “me ayudaron a salir de mi zona de confort. Una de mis primeras encomiendas fue formar un programa de igual a igual entre miembros de un equipo, la idea era formar un sentido de pertenencia y alentar a las colaboraciones entre sí. El éxito que tuvo fue que nos tendiéramos la mano los unos a los otros y eso es lo que pretende la red”.
Se trata de un foro en el que se pueden exponer ideas sin juicios ni egos, la apuesta final es formar grandes equipos de trabajo y para eso hay que conocer bien al otro para saber cómo puedes apoyarte en él, argumentó.
Dijo que una de las características a las cuales las mujeres han sabido sacar provecho es que pueden hacer muchas cosas a la vez.
“No debemos subestimar nuestras habilidades. No es un secreto, nosotras podemos hacer malabares. Eso me ha ayudado en mi carrera en numerosas ocasiones y no es algo que debamos esconder, al contrario, deben de saber de nuestras fortalezas y que nos sirvan de impulso”, señaló.
Coincidieron en que no se puede dejar de empujar para que las condiciones entre hombres y mujeres en el sector logístico y los negocios en general sean más parejos.
Ellas son prueba de que se puede. Y se debe.