La red de activos físicos que facilita la eficiencia del transporte y almacenamiento de mercancías es crucial para agilizar las operaciones logísticas.
Reducir el inventario, los residuos y mejorar la distribución eficaz de los bienes requiere de diversas instalaciones de almacenamiento, incluyendo parques logísticos y centros de consolidación.
Requiere por igual redes de transporte como carreteras, ferrocarriles, puertos y aeropuertos.
Además, implica el desarrollo urbano y de infraestructura para facilitar procesos de entrega fluidos.
Así lo explicó el RMI (fundado como el Rocky Mountain Institute), organismo que publicó el informe "Transformar el sector logístico en los países del G20".
En un texto previo revisamos los diferentes segmentos en los que se dividen dichas soluciones y toca turno de abordar el apartado de infraestructura logística.
Parques logísticos
La infraestructura logística se caracteriza típicamente por un alto grado de dispersión.
Dicha condición conduce muchas veces a ineficiencias por la pérdida de economías de escala y densidad en la actividad logística.
Resulta en mayores distancias recorridas por las mercancías y mayores plazos de entrega requeridos.
Los parques logísticos actúan como centros para todas las actividades logísticas, incluido el almacenamiento, distribución y transporte.
Si se encuentra cerca intersecciones de redes, los parques logísticos también pueden servir como centros intermodales, facilitando una carga fluida y transferencia entre varios modos de transporte como camiones, trenes, barcos y aviones.
Integrando la energía renovable en parques logísticos a través de energía solar en los tejados puede reducir aún más la huella de carbono de la infraestructura logística.
Planificación industrial
A través de ella, el gobierno puede crear un sistema integral de uso de la tierra a largo plazo.
Se trata de un plan para la ciudad, designando áreas específicas para fábricas y almacenes, asegurando que estén ubicados lejos de límites residenciales.
Este enfoque estratégico promueve la consolidación de las actividades industriales dentro zonas diferenciadas y mejora la interconectividad entre la industria y la infraestructura logística.
También contribuirá a la creación de ciudades habitables minimizando los viajes en camión y la industria dentro de los centros urbanos.
Zonas de carga y estacionamiento asignadas
Dichos procesos se pueden agilizar al contar con áreas designadas en el núcleo urbano para tales fines.
Esto se puede lograr mediante una logística dedicada a espacios de estacionamiento en la calle donde los vehículos de reparto puedan detenerse y descargar sus mercancías.
Los sensores de estacionamiento pueden mejorar aún más estas zonas, mejorando el manejo de mercancías, reduciendo el tiempo de descarga y minimizando las alteraciones del tráfico.
Zonas de bajas emisiones
Son áreas designadas dentro de ciudades o regiones que implementan regulaciones para restringir la entrada de vehículos contaminantes en función de sus niveles de emisiones.
El objetivo principal de estas zonas es mejorar la calidad del aire y disminuir la contaminación prohibiendo la entrada de vehículos que no cumplen con los estándares de emisiones especificados.
Corredores para camiones con cero emisiones
Ese tipo de corredores son tramos de autopista equipados con la infraestructura necesaria para apoyar viajes fluidos para unidades con niveles cero contaminantes.
Esta infraestructura incluye opciones como carga rápida, cambio de batería y estaciones de repostaje de hidrógeno.
En un próximo texto abordaremos la parte final del estudio, que se refiere al desarrollo de políticas que ayuden a un transporte sustentable, así como las inversiones requeridas para ese fin.