La dinámica de los mercados actuales fomenta que las organizaciones se reinventen con mayor frecuencia que en el pasado, la reinvención debe ir más allá de la estrategia y considerar al menos los procesos, los recursos, los talentos y los indicadores de desempeño.
Si bien la cadena de suministro está sujeta a fuerzas particulares de su mercado, industria y regulaciones, existen seis factores claves que deben ser considerados bajo el entorno competitivo actual y estos son:
1.Empresas guiadas por la demanda
La cantidad de información generada por los clientes y la velocidad con la que ésta se encuentra disponible permite a las organizaciones modernas reducir su dependencia de modelos de pronóstico estadísticos y otorga a los planeadores y diseñadores información que debe conducir a un mejor diseño de productos, un mejor servicio al cliente y una mayor rentabilidad del negocio.
El pronóstico no desaparece, pero se integra con la información para reducir la incertidumbre y poder elaborar escenarios de negocio que permitan a las organizaciones responder al mercado de forma ordenada.
El objetivo fundamental es escuchar “la voz del cliente” en todo momento para identificar y predecir sus hábitos de consumo y sus preferencias. Las organizaciones deben aprovechar todo contacto con el cliente para vislumbrar sus necesidades y transmitir esa información a todos los socios de la cadena para satisfacerlas en el momento adecuado y con la calidad requerida.
2.Redes colaborativas y sistémicas
La colaboración es la clave de la integración virtual. En la búsqueda de la optimización, las organizaciones se concentran en menos actividades y dependen más de sus proveedores para responder eficazmente a sus clientes. La tercerización seguirá creciendo como una necesidad competitiva.
La colaboración no debe fundamentarse en voluntades, sino en estructuras formales alrededor de sistemas que garantizan la disponibilidad de información en tiempo real al elemento de la cadena de suministro que debe tomar una decisión donde se maximice el beneficio colectivo a la cadena y no el de una organización en particular.
La selección de los socios de la cadena es una decisión política de la alta dirección que requiere del compromiso de todos los miembros de la organización para su buen funcionamiento. Aprender a trabajar internamente en forma colaborativa, nos permitirá construir la cultura necesaria para extender la colaboración con nuestros socios del negocio.
3.Estructuras ágiles y escalables
La agilidad está compuesta de dos elementos: la capacidad de responder rápidamente a los cambios del mercado y hacerlo de forma rentable para los socios de la cadena. Las soluciones deben diseñarse, producirse, distribuirse y venderse en el momento justo que el cliente lo demanda, eliminando redundancias, burocracia y retrabajos.
Si bien responder rápidamente a las demandas no es algo nuevo, el reto actual consiste en lograrlo sin crear “mega organizaciones”; el modelo se basa en crear estructuras virtuales adecuadas al reto temporal y después desintegrarlas de manera dinámica sin generar pérdidas para los participantes.
4.Flujo rápido
La velocidad con la que las cadenas muevan la información afectará la cantidad y disponibilidad de materiales y servicios. El desafío es tener la información oportuna en el momento adecuado para sólo tener la cantidad de producto y servicio demandada por el mercado.
Debemos comprender el impacto de la velocidad sobre otras variables críticas del negocio. Para hacerlo rápido hay que hacerlo bien a la primera, y esto impacta la calidad. Al hacerlo rápido y bien se logra reducir el costo y esto se traduce en mejores márgenes, además se gana la preferencia del cliente.
Se recomienda tener presente que el flujo se debe lograr dentro de la organización y con los socios de la cadena de suministro.
5.Digitalización
La velocidad con la que se captura la información digital debe estar acompañada de su distribución a lo largo de la cadena para lograr visibilidad de la demanda y el suministro. Las capturas de información deben ser reducidas al mínimo para evitar errores.
Los sistemas de información deben ser capaces de interpretar la información y, mediante “reglas de negocio”, generar acciones sin necesidad de la intervención humana. Aunado a ello, dichos sistemas deben actuar como soportes para la toma de decisiones y no sólo como acumuladores de datos.
Las organizaciones deberán dar más importancia a la información y el conocimiento, a su documentación y disponibilidad en forma digital para reducir las curvas de aprendizaje y acelerar el tiempo de respuesta a los mercados.
6.Responsabilidad ambiental y social
Los cinco factores anteriores tienen un enfoque directo en mejorar las competencias de la empresa para servir rentablemente a sus consumidores y tienen un enfoque en la empresa como generadora de valor para sus clientes y accionistas, sin embargo, las organizaciones deben ser también vistas como generadores de valor social para sus comunidades.
La globalización ha sido interpretada por algunos como el permiso de ir a contaminar en otras latitudes o el de trasladar todo su negocio a otros países y reducir sus actividades a una “simple comercialización”, sin embargo, los resultados en los últimos años han demostrado que las organizaciones deben trabajar estrechamente con sus comunidades creando lazos que aporten beneficios a ambos como la creación de fuentes de trabajo y el consumo de los productos y servicios.
Responder a estas tendencias de forma integral permite a las organizaciones garantizar su competitividad.
La interdepencia de los factores
Si una organización busca implementar nuevos modelos de operación o estrategias deben considerar esos seis elementos de forma integral, de lo contrario los resultados no serán los óptimos para los retos actuales.
La secuencia de integración de estos factores pudiera ser la siguiente:
•Se deberá crear una cultura organizacional y sistemas enfocados en el cliente final. Capturar la voz del cliente debe ser una tarea crítica de todos y cada uno de los miembros de la organización.
•Se deben analizar las necesidades de colaboración con otros socios de las cadenas de suministro a las que se pertenece, e identificar las necesidades de colaboración y los sistemas que apoyarán esta forma de trabajo.
•Los socios deberán tener claros sus valores en relación con la responsabilidad social y ambiental para asegurar un trabajo armónico entre ellos y con el entorno.
•Con los miembros de la cadena se deben identificar los escenarios de mercado que demandan agilidad y escalación de las estructuras para establecer acciones específicas de cada uno de los participantes en estos “eventos”.
•Ya con los procesos de operación normal y los posibles escenarios que demandan modificaciones a la capacidad se deben definir los canales digitales de comunicación; la información es un medio y no un fin, pero su oportunidad y claridad hace la diferencia entre ser solamente un conjunto de datos sin sentido y generar acciones específicas con base en modelos de toma de decisión.
•Con todo esto estructurado se podrá lograr un flujo rápido de materiales que se convierta en una ventaja competitiva para la cadena.
Una vez terminado el ciclo, éste se deberá realinear en función de lo demandado por los clientes y evaluar si las estrategias, los recursos, los talentos y los indicadores de desempeño siguen siendo los adecuados para estas nuevas demandas.
Jesús Campos Cortés*
* Es ingeniero, CPIM CIRM, C.P.M, PMP, CPAM, CQIA, CEI, CSCP, CPSM, CPF, PLS; Presidente de APICS Capítulo México; y Socio Director en Corporate Resources Management.