La verdadera transformación digital representa implicaciones intensas para las organizaciones, pues afecta el talento, la estrategia, los modelos de negocios e incluso la forma en que están organizadas las compañías, lo que genera empresas más flexibles, receptivas e interconectadas, capaces de tomar decisiones más informadas.
“La transformación digital no puede suceder en el vacío; no termina simplemente con la implementación de nuevas tecnologías que se dejan funcionando”, señala el reporte sobre la cuarta revolución industrial o industria 4.0 y las desconexiones en el camino hacia la transformación digital.
La encuesta global, realizada a 361 ejecutivos en 11 países, sugiere que los CEOs y directivos son conscientes de las oportunidades que crea esta revolución y que aprecian la transformación digital. Sin embargo, las desconexiones en diferentes áreas sugieren que los ejecutivos no están muy seguros de cómo llegar a la totalidad de la misma.
Añade que a medida que buscan transformar sus organizaciones en empresas interconectadas capaces de operar en una era cada vez más digital, los líderes tienen muchas oportunidades para construir operaciones más conectadas, sensibles e inteligentes, y encontrar un camino que realmente encarne la promesa de la revolución 4.0.
También revela que únicamente el 50% de los CEOs y el 68% de los directivos ven la transformación digital como una vía para mejorar la rentabilidad de sus empresas, mientras que para el 94% de los encuestados la digitalización en una organización es imprescindible. Dato que muestra que aunque se asocian las mejoras operacionales con el crecimiento estratégico, no se relaciona necesariamente la transformación digital con el crecimiento de los ingresos que resultan de nuevos productos o modelos de negocios.
Solo 34% estima que la innovación digital es impulsada desde la supply chain de suministro, detrás de la tecnología de la información y las operaciones/producción. “Esta respuesta es especialmente sorprendente dada la estrecha relación funcional que existe entre la cadena y las operaciones/producción dentro de la cadena de valor de fabricación en general”
Para revelar estos resultados, Deloitte se centró en las compañías de manufactura, energía, petróleo, gas y minería, examinando cómo y dónde están o planean invertir, en la transformación digital. Así como algunos de los desafíos clave que enfrentan al hacer tales inversiones, además de saber cómo están configurando su estrategia técnica y organizativa en torno a la transformación.
“A medida que la industria 4.0 toma forma en casi todas las organizaciones, el estudio revela cinco paradojas principales: La paradoja de la estrategia, de la cadena de suministro, del talento, de la innovación y lo que conlleva el aspecto físico-digital-físico”.