De acuerdo con un informe de McKinsey Global Institute, en México más 25 millones de empleos podrían ser sustituidos por robots o máquinas y estima que la automatización podría aumentar el crecimiento de la productividad global en 0.8% y 1.4% anualmente.
El informe indica que México se encuentra entre los cinco países con un alto porcentaje de empleos potencialmente automatizables con 52%, antes de Japón que tiene el 56%, Tailandia el 55% e India el 52% con 395.3 de empleos automatizables.
Le siguen Indonesia con el 52%, China con el 51% con 235.1 millones de empleos automatizables. Le sigue Brasil con 50%. En tanto, Alemania tiene el 48%, Estados Unidos el 46%, con 60.6 millones de plazas en riesgo. Reino Unido tiene la última posición con 43%.
También se identifica a México como una economía emergente con población más jóven, junto a India, Indonesia, Nigeria, Sudáfrica y Turquía y con aspiraciones de crecimiento a largo plazo, con el fin de elevar el nivel de vida de la población, que va en aumento. En Singapur o Noruega sólo 1.2 y 1.1 millones de empleados son potencialmente automatizables.
Para saber los rubros en los que las máquinas reemplazarán a los humanos, el instituto analizó el impacto de la automatización en 54 países con lo que cubrió el 78% del mercado global laboral y los resultados arrojaron que para el año 2055, a nivel mundial la mitad de la fuerza laboral sería automatizada.
Agrega que menos de 5% de todos los empleos pueden ser completamente automatizados con tecnologías probadas, cerca del 60% de todas las ocupaciones tienen al menos un 30% de actividades que pueden ser hechas por un robot, lo que significa que la automatización tendrá amplios efectos a través de la geografía y de sectores.
“La automatización dejó de ser ciencia ficción para alcanzar la realidad y cada vez más compañías incrementan el uso de robots en las líneas de producción o algoritmos para optimizar su logística, manejo de inventarios o realizar algunas funciones clave del negocio”, indica el informe de McKinsey Global Institute.
Los países con fuertes tasas de crecimiento de la población verán que la proporción entre el trabajo y la población total alcanzará su punto máximo en la década de 2050, asegurando que cuenten con la mano de obra necesaria para mantener el PIB per cápita.
A pesar del panorama en los países mencionados, la automatización por sí sola no será suficiente para satisfacer las aspiraciones de crecimiento y se necesitarán otras palancas de productividad para sostener su desarrollo económico, advierte el documento.
Por lo que el instituto recomendó a los gobiernos elevar las capacidades y habilidades entre la población y promover la creación de empleo. En tanto que los trabajadores necesitan trabajar más cercanamente con la tecnología para identificar las áreas que no pueden ser sustituidas
Fuente: El Financiero.