El desarrollo portuario de Panamá en los últimos años es un caso de éxito que México podría tomar como ejemplo para mejorar sus procesos y servicios en los puertos, tanto en los actual importancia como en aquellos en los que se piense invertir en el mediano plazo, “porque los puertos son una inversión de infraestructura que se queda para siempre”, opinó Miguel Casanueva Velasco, Director General de la Asociación Mexicana de Infraestructura Portuaria, Marítima y Costera (AMIP), en entrevista con Énfasis Logística.
El directivo refirió que el actual movimiento de contendedores en el puerto Panamá es más eficiente y más barato, por ejemplo, que en los puertos de Salina Cruz, Oaxaca o en Coatzacoalcos, Veracruz. Además de que existe una gran eficiencia en sus Zonas Económicas Especiales. No obstante, esta situación era muy distinta hace más de 40 años, a principios de los setenta.
Dijo que era difícil entender cómo operaba el sector portuario de ese país debido a las circunstancias económicas y políticas que prevalecían porque el puerto no tenía las operaciones actuales de comercio exterior-internacional, “no comercio panameño, es comercio mundial y además es eficiente, lo que permitió detonar el crecimiento de los barcos; es el caso del Canal ampliado, hoy muchos más barcos pueden pasar por Panamá y pueden ser más eficientes”.
En cambio, México ha fallado mucho en el sector portuario y el sector marítimo está prácticamente en inexistencia. Por lo tanto, uno de los pendientes es hacer que los negocios resulten a partir de una coordinación en cuanto a perspectivas de crecimiento desde la parte privada como del gobierno: Los puertos tienen que iniciar sus proyectos y terminados en tiempo y forma, o puede ocurrir como en el puerto de Veracruz, que debió terminarse hace 10 años y apenas se contempla el inicio de operaciones en 2019, señaló.
Entre los puertos mexicanos que requieren atención está el de Manzanillo porque presenta saturación; el de Guaymas, si bien está creciendo mucho, tiene potencial para generar un crecimiento importante; otro es el de Altamira, que ya está en expansión al igual que el de Veracruz. “Aunque el siguiente problema que tenemos es ver dónde se va a fincar las operaciones costa afuera para las áreas petroleras de las cuales se esperaba que iban a detonar la economía del país durante muchos años y ya se acabó”.
En este contexto, acotó que los retos logísticos actuales del sector portuario en México son la planeación estratégica, la coordinación entre autoridades y la no penalización al transporte terrestre. Agregó que otro de los graves problemas del país es que está rodeado de costas, el exceso de costas, por lo tanto, “no es un éxito, es un problema porque si el país tiene tantas costas, tantos puertos, a cada costa, a cada puerto hay que cuidarlos y se tiene que poner una autoridad y una vigilancia y seguridad”.
Panorama del sector
Casanueva Velasco precisó que los puertos de México requieren una inversión alta (que no recaiga totalmente en el sector privado) y de un plan estratégico ‘amarrado’ de un presupuesto; “no obstante que siempre se ha ido un poco tarde a todos los crecimientos que requiere el país, nuestro comercio exterior ahora es mucho más eficiente y con industrias importantes que demandan el abastecimiento a través de los puertos”.
Contempló que con la situación económica actual de ese país, los puertos mexicanos tendrían más trabajo porque cabe la posibilidad de que no se transporte tan fácil la carga a través de Estados Unidos. Además, refirió que existen empresas en México con inversión extranjera y mexicana, que se hacen cargo de las maniobras de los puertos en el Golfo como en el Pacífico.
Señaló que también se tienen mejoras en los procesos de la aduana, que son más modernos y tecnificados, por ejemplo, para saber y registrar el contenido de los contenedores, lo que facilita los tiempos y genera ineficiencia. Aunque apuntó que falta que las autoridades del puerto cuenten con sistemas que se comuniquen entre sí para compartir la información necesaria, que puede darse entre la aduana, capitanía de puertos y administración portuaria, el agente naviero, migración o aduana.
Referente a las dificultades en el mercado naviero, acotó que como cualquier otro negocio, no está exento de problemático: Ser dueño de barcos y transportar contenedores no es fácil, la crisis que inició en el 2008 sigue golpeando, sucede que ya nos acostumbramos a la palabra, pero hay una crisis financiera, en la que se han visto afectadas empresas coreanas, de un país tan importante para el sector.
Finalmente, el director general de AMIP recomendó tomar en cuenta la eficiencia y el cumplimiento de horarios, personal, óptimos tiempos de carga y descarga y trámites al momento de elegir el servicio de intermediarios logísticos en el servicio naviero, “todo tiene que realizarse con absoluta certeza”, expresó.