Apenas llega diciembre y la gran mayoría de los hogares en el mundo cambia de aromas y color ahora huelen a pino y a frutas mientras se van tiñendo de rojo y blanco. Los grandes empiezan a planear las fechas más especiales del mes, mientras los más pequeños ya están ensayando sus cartas a Santa Claus y a los Reyes Magos.
El tiempo se acaba y los regalos no se hacen esperar. Las tiendas físicas o en línea; las empresas de mensajería y paquetería; niños y adultos; Santa Claus y sus renos… en fin, todos están muy ocupados organizando el trabajo, planeando los tiempos y esperando que todo salga bien durante una de las noches más especiales del año.
Pero ¿qué hay detrás del telón?, ¿Qué pasa durante la nochebuena para que miles de millones de personas estén satisfechas?, ¿De qué depende que mil millones de juguetes amanezcan bajo el árbol de Navidad cada 25 de diciembre?, ¿Cómo es la logística de Santa?, ¿Qué la hace tan eficiente?
Si bien una logística que opera con tal perfección podría, incluso, ser considerada digna de un artista, la verdad es que su éxito radica en cada parte del proceso, es decir, se trata de una maquinaria cuyos engranes saben perfectamente qué hacer, cómo hacerlo y sobre todo, en qué momento. Santa Claus, en este sentido, es quizá uno de los casos más emblemáticos de una logística bien lograda, integrando cada eslabón de la cadena de suministro.
Un inventario en la palma de la mano
Si se considera a Santa Claus como una gran empresa de mensajería y paquetería, su mercancía llega a tiempo y sin margen de error gracias a que tiene un control absoluto de su inventario y lo tiene al alcance de su mano, es decir, cuenta con terminales portátiles que le permiten a él y a sus duendes administrar, manipular y tener visibilidad de todos y cada uno de los juguetes disponibles prácticamente en tiempo real.
Aunque parezca un asunto sencillo, para Santa contar con una terminal portátil significa poder darle seguimiento a los miles de juguetes en toda la cadena de distribución, es decir, con un dispositivo en sus manos, Santa Claus puede controlar de manera móvil los costos, incrementar la productividad de su empresa y lo más importante: consolidar y aumentar la satisfacción de millones de niños.
Antes de pasar a la complejidad de los procesos de Santa, es importante considerar que si bien los niños del mundo ya no sólo mandan cartas, sino que ahora también envían correos electrónicos y posteos en redes sociales, la capacidad del personaje de la cabellera blanca cuenta con una sofisticada y robusta solución de captura automática de datos capaz de interactuar con los diferentes sistemas de su “empresa” en auténtico tiempo real, lo que le permite supervisar todas las operaciones de su inventario y su almacén.
Mil millones de pedidos en 24 horas
Hablando de una empresa de mensajería o paquetería, sería importante cuestionar porqué Santa Claus tiene la capacidad de atender más de mil millones de pedidos y entregarlos en sólo 24 horas. ¿Será que se la pasa todo el año armando paquetes, clasificando regalos o contando los juguetes que le harán falta para el siguiente diciembre?
Probablemente no. En este sentido, los sistemas de tecnología móvil, por ejemplo, permiten hacer una logística al estilo Santa: un seguimiento exhaustivo de todos los elementos que pasan por la cadena de suministro para crear un proceso más eficiente, un gran ahorro de horas y horas de cross-docking, de administración de CEDIs, patios y andenes de carga, y por supuesto en la recolección y en la entrega.
Ya sea con las terminales portátiles, con los sistemas RFID e incluso, con los lectores de códigos de barras, tanto Santa como cada uno de sus duendes corresponsales tienen la capacidad de obtener la información que necesitan en tiempo real y sobre todo, en el justo lugar donde se encuentren.
De esta manera, el pionero de la logística navideña cuenta con la visibilidad completa y absoluta de su proceso, su mercancía y su personal, pues tiene a su alcance las soluciones dinámicas y comprobadas para prácticamente cualquier requisito de automatización de operaciones de transporte y logística.
Santa Claus y su voz de autoridad
La sonrisa de Santa Claus es un icono navideño en prácticamente todo el mundo; sin embargo, pocos conocen su voz, que a decir verdad, se trata de una voz cálida, amable y con un tono de autoridad innegable. Pero no se trata de que su voz sea un designio divino, sino una voz clara y concisa.
Santa lo sabe y es por eso que también adoptó una solución de voz que le permitiera comunicarse con sus duendes, de tal manera que éstos le pudieran hacer llegar las peticiones de todos los niños del mundo. Al hablar de ahorro, con esta herramienta Santa Claus ha dejado de leer tantas cartas y pasó a escuchar las voces de su equipo de trabajo.
Con la tecnología móvil, no sólo Santa sino cualquier empresa que busque innovación y movilidad para optimizar un proceso de negocio, la oferta es muy amplia: operaciones óptimas, más capacidad en la toma de decisiones, mayor experiencia para las personas que como los duendes de Santa se dedican a industrias cuyos entornos no son los más favorables, todo con el poder de la voz.
Y el ahorro no es poca cosa. Más de un millón de personas operando con la misma solución de voz han demostrado que se puede lograr un ahorro de hasta 20 mil millones de pesos al año, además de que es fácilmente integrable a los principales sistemas WMS y ERP, lo que le permite soportar distintos dispositivos informáticos.
Otra característica tanto del proceso de Santa como de las herramientas tecnológicas es que se trata de soluciones diseñadas para implementaciones completas de extremo a extremo, es decir, para que el usuario se asegure de que obtendrá resultados sin complicaciones confiables.
Y de esta manera, las soluciones de Santa dejaron atrás las etiquetas, los escáneres y todo tipo de papeles, pues la inteligencia de sus sistemas de almacenamientos son una realidad sin papel.
Finalmente, como parte del enorme proceso logístico que todos los años echa a andar Santa Claus, y hablando específicamente del poder de su voz, la herramienta va más allá: pues también es posible activarla según los propios flujos de trabajo, lo que deja atrás el hecho de que sea sólo concebido como una solución para recolectar información, ya que su precisión y eficiencia permiten solucionar tareas de almacén hasta en los momentos más críticos.
Así es como Santa se ha convertido en el pionero de la logística. El paso de los años y el aumento de las exigencias le ha dejado la experiencia y el conocimiento para saber cómo enfrentarse a los retos de la industria y a las exigencias de sus usuarios. El objetivo, según se deja ver, es que parezca fácil porque es fácil. Las herramientas ahí están y el conocimiento también se puede adquirir.