Un reporte publicado por The Economist Intelligence Unit (EIU) a nombre de British Standards Institution (BSI) reveló que el 88% de los líderes empresariales cree que la resiliencia es una prioridad para sus organizaciones e indispensable para el crecimiento a largo plazo.
Sin embargo, el estudio señala que tan solo el 29% confía que sus empresas han incorporado plenamente las prácticas de resiliencia, mientras que el 44% espera que sea el caso en un plazo de tres años.
En el reporte, la definición de resiliencia como motor del éxito empresarial, va desde la prevención de fallas operativas hasta un facilitador estratégico. 61% de los encuestados lo ven como una fuente de ventaja competitiva, con más de la mitad viendo un vínculo muy fuerte entre la inversión en esta área y el rendimiento financiero a largo plazo.
El estudio Organizational resilience: Building an enduring enterprise, considera que el logro de la resiliencia para sobrevivir y prosperar en el largo plazo se ve limitado por la falta de habilidades y conocimientos, compromiso de liderazgo insuficiente y consideraciones financieras a corto plazo. También destaca que la resistencia cultural y carencia en habilidades crean puntos débiles y cuellos de botella dentro de una organización.
Por su parte, 39% de los líderes de negocio luchan por asegurar el apoyo empresarial a las medidas esenciales de resiliencia como la seguridad de la información, la eficiencia de la cadena de suministro y el gobierno corporativo.
Sólo 19% de las organizaciones europeas ha logrado totalmente implementar procesos resilientes, en comparación con el 37% de empresas en América del Norte y 34% de compañías en Asia Pacífico.
A nivel mundial, un tercio (33%) de las grandes organizaciones han incorporado procesos resilientes a través de su negocio. Los pequeños negocios se ven frenados por la falta de conocimiento, mientras que las grandes empresas citan problemas financieros. Se encontró que las organizaciones más antiguas son más propensas a ver la conexión entre resiliencia y el crecimiento a largo plazo, detalló el reporte.
Asimismo, detalló características clave de las organizaciones resilientes entre las que se encuentra mantener un enfoque proactivo, es decir, mantener la voluntad de adaptarse antes de ser obligadas a ello.
También es importante contar con el apoyo desde lo alto de la organización para implementar el proceso. Así también contar con la voluntad de escuchar las necesidades del mercado e inclusión holística y reconocimiento de la responsabilidad y contribución a la empresa de todos.
Destaca que las empresas deben de mantener una visión, propósito e identidad claros integrándola a una visión a largo plazo que implica evitar responder únicamente a las metas financieras de corto plazo.