Para brindar un panorama de la actualidad del mercado aéreo debemos remontarnos a la crisis económica mundial que afectó a todos los sectores de la economía, fundamentalmente entre los años 2008 y 2009 en los que el mercado de cargas en general se vino a pique. La carga aérea se mueve paralelamente con la evolución económica de los países, si se observan las curvas de la economía mundial y las curvas del movimiento de carga aérea son paralelas, es decir, son influidas de la misma forma.
Existen ciertos productos que funcionan como indicadores muy claros de la marcha de la economía, como por ejemplo los semiconductores. Con la gran crisis económica se paró todo el comercio mundial, los importadores dejaron de comprar y empezaron a agotar el stock, entonces se suspendió totalmente la carga, tanto aérea como marítima. Esta última comenzó a bajar mucho los precios y afectó a la carga aérea, el tráfico entre Europa y Estados Unidos fue el más afectado, Asia sufrió menos al igual que Sudamérica.
A pesar de todo, los efectos de la crisis no fueron muy importantes y no se requirieron cambios profundos en los mercados, y el nivel de recuperación es muy alto. Sin embargo algunas líneas aéreas cargueras se vieron perjudicadas por tener máquinas obsoletas, como el caso de Arrow Air que dejó de operar. En cargas, el combustible puede ser inclusive hasta más del 50% de los costos, entonces aquellos que operaban con aviones viejos que consumen mayor cantidad de combustibles se vieron fuertemente perjudicados. Sin embargo no hubo un fuerte ajuste en el mercado.
Desde el punto de vista de la Argentina, que no exporta electrónicos como el caso de Asia o Estados Unidos, el tráfico hacia el norte se vio afectado en menor medida.
La exportación local basada en perecederos y productos de consumo sufrió una importante disminución de precios que perjudicó a los productores pero sin embargo se mantuvo cierta actividad. En relación al tráfico norte/sur, como la Argentina no sufrió en gran medida los efectos de la crisis, continuaron viniendo exportaciones relacionadas con la electrónica que mantuvieron un poco la actividad.
Analizando el primer semestre de este año, la región creció el 44%, crecieron las exportaciones, crecieron las salidas de productos perecibles, está creciendo también lo que es la carga intra-regional que antes no era muy significativa, y también el tráfico norte/sur, que incluye el tráfico procedente de Asia que viaja vía Miami. Hay un movimiento importante, se recuperó bastante la carga, las bodegas de las compañías mixtas están con buena ocupación.
La opción aérea
Lo que define el uso del transporte aéreo es el tipo de producto, fundamentalmente aquellos muy estacionales o muy perecibles y que, además, son productos por los que el consumidor paga un valor agregado. Por ejemplo los arándanos, que son fuertemente consumidos en el día de acción de gracias en los Estados Unidos, donde todo el mundo come el pavo con la salsa de arándanos, entonces se produce una demanda excepcional, por lo que es necesario que esta mercadería esté fresca en el lugar y en un momento determinado. Eso es lo que permite el transporte aéreo. Lo mismo sucede con el pescado, que si bien se puede transportar congelado hay mucha gente que prefiere el pescado fresco, entonces es necesario que el producto esté en 15/20 horas en destino para ser vendido y consumido.
En otras regiones del mundo se dan casos similares. Por ejemplo en Ghana, en las plantaciones de ananá instalaron plantas procesadoras en las mismas plantaciones, entonces cosechan la fruta, la cortan, la envasan y sale enfriada rumbo a Inglaterra vía aérea y, en pocas horas, puede ser comprada fresca en las góndolas. Lo mismo sucede con las flores, que tienen una vida útil bastante corta, y aún no hay formas de conservación que permitan transportarlas por otra vía que no sea el transporte aéreo.
Por otro lado, Centroamérica y el Caribe que exportaban bastante por avión a los Estados Unidos han disminuido los volúmenes, porque cierto tipo de frutas, con contenedores enfriados y con barcos más rápidos, en 48hs pueden llegar a Miami evitando el transporte aéreo.
Años anteriores se transportaban muchos papeles relacionados con el clearing bancario, todo esto cayó mucho con los sistemas informáticos, antes había mucho papel urgente que debía ser despachado vía aérea.
Nosotros exportamos cierto tipo de productos que se quieren frescos en el lugar, que tienen que salir por avión y por los que el consumidor está dispuesto a pagar.
Tanto Estados Unidos como Europa son los principales destinos, la carne fresca -por ejemplo la cuota Hilton-, es enviada vía aérea. Nuevamente se puede ver el tipo de corte que es exportado, que son cortes premium por los que el consumidor está dispuesto a pagar un precio extra. Sale mucha carga hacia Europa y los Estados Unidos. Nosotros traemos carga de Asia, transpolar por el vuelo Ohakland Sydney o a través de Miami y Panamá, cargas que se distribuyen tanto hacia el norte como hacia el sur.
La operación de carga aérea no es sencilla, y la posición geográfica de nuestro país no ayuda. Estamos muy al sur, todo depende de lo que podríamos llegar a exportar de Argentina, de Chile y del sur de Brasil, es decir tenemos poco atrás para armar una operación carguera.
La infraestructura local
Ezeiza es un buen aeropuerto y la terminal de cargas es muy buena, hay que decir que la PSA ha hecho un trabajo muy bueno. En Ezeiza cargas se puede operar muy bien. Faltan facilidades en ciertos aeropuertos del interior del país, que podrían sacar cargas por avión y no están preparados, pero tampoco hay una necesidad de cargas que lo justifique.
El problema que seguimos teniendo es más que nada burocrático, de regulaciones y de facilidades a la importación y la exportación. A nivel mundial se está trabajando en la eliminación de todo lo que es administrativo en papel, que ya está implementado en la mayoría de los países europeos, en Estados Unidos, Canadá, Chile, Corea, Hong kong. Acá, como en otros países, seguimos con el papel y el control del control, la copia, la fotocopia, el sello. Hay un problema cultural con respecto al papel que hace bastante poco eficiente el trabajo, cuando hoy en día con el sistema electrónico podrías tener hasta un mejor control. La información electrónica que se va generando en el origen de la carga es la misma que se envía al aeropuerto de destino, con lo que se tiene la certeza de lo que se dice acá es lo mismo que se encuentra en la llegada.
En muchos países lo que dice el papel de exportación es una cosa y lo que dice el de importación es otra, con el fin de pagar menos derechos de importación. Por ejemplo, le suben el valor acá porque cobran subsidios y se lo bajan en destino, o sea, muchos manejos que se podrían evitar.
El otro problema es la falta de consistencia y uniformidad a nivel mundial de los requisitos, cada país te pide una cosa distinta, a pesar de que existen normativas y la Organización Mundial de Aduanas tiene un marco de acción.
Perspectivas para el mercado aéreo local
Desde nuestra compañía la idea es, así como mecanizamos y sistematizamos las operaciones con todo el atraso que teníamos, optimizar todos los productos para generar una mayor calidad de servicio al cliente. Estamos trabajando en una serie de desarrollos, como sistemas para administrar las bodegas disponibles en los aviones, diferentes modalidades de pagos, etc. para entrar en otros mercados que requieren gran flexibilidad. La expectativa es bastante grande, creemos que existe un mercado más que interesante para mover.
También desarrollamos una política de transparencia en la distribución de las bodegas durante las temporadas de mayor demanda, mediante la cual las asignaciones de bodega se hacen a partir de un análisis de la distribución que se hizo el año anterior, y una valorización de las cargas transportadas por los operadores en la temporada baja, para no dejar afuera a estos operadores. Con esas dos ecuaciones proporcionales llegamos a la proporción final de asignación de bodegas, con esto generamos transparencia y beneficiamos a todos los jugadores que participan en el mercado.
Nosotros tenemos que aprovechar el hecho de que Aerolíneas-Austral es la única que llega a todo el país, las otras líneas aéreas que operan en el mercado local van a los destinos que resultan rentables. Nosotros como empresa estatal tenemos el compromiso de mantener conectado al país, tenemos que aprovechar esa ventaja para realizar otro tipo de negocios. La idea para el futuro no es seguir esperando que nos lleguen los trabajos, sino aprovechar las ventajas competitivas y tener una actitud más agresiva en el mercado.