Aunado a esto, la antigüedad, ponchaduras, golpes, deformaciones, protuberancias o chipotes, cortes, desgaste irregular, etc., son otro tipo de factores que pueden provocar una decisión de cambio.
Una vez identificada la necesidad de contar con neumáticos nuevos, será necesario considerar:
- Acudir un centro de servicio autorizado que ofrezca asesoría especializada, así como variedad de diseños, precios, medidas y características, que puedan adaptarse a las especificaciones del presupuesto asignado.
- Buscar que los neumáticos cuenten con características técnicas similares ya que, de lo contrario, es probable que el vehículo no responda adecuadamente y se dificulte su control. Si por alguna razón es necesario cambiar sólo una, lo ideal es seleccionar un neumático de la misma marca, diseño y medida que el resto.
- Rotar los neumáticos de posición y eje. Si el cambio fue solo de una o dos llantas, los especialistas recomiendan siempre instalar las llantas nuevas en el eje trasero y las usadas colocarlas en el eje delantero para un mejor desempeño.
- Evitar utilizar neumáticos de menor índice de carga y símbolo de velocidad a los especificados por el fabricante del auto.
- Preguntar por las opciones de garantía con la que cuentan los neumáticos seleccionados.
Nota: En el caso de los neumáticos con 5 o más años de uso, es importante validar con un especialista técnico que sigan siendo funcionales y seguros, aunque no presenten alteraciones aparentes.
Fuente: Bridgestone.