El comercio internacional atraviesa por una de sus etapas más desafiantes en años recientes, marcada por alzas extraordinarias en costos por contenedor. Una escalada que terminará tan pronto concluya el diferendo comercial entre China y Estados Unidos. En caso de que eso sea posible.
Esa es la expectativa que tiene Eva María de los Dolores Muñoz, la nueva presidenta de la Asociación Mexicana de Agentes de Carga (Amacarga) quien augura un año difícil para el comercio exterior hasta en tanto no haya una certidumbre del rumbo que tomará la política económica de Estados Unidos.
“Veo un año difícil, un año pesado. No creo que sea un año de crecimiento”, afirma en entrevista con The Logistics World. Augura que la situación se repetirá más adelante debido a la ineludible relación entre el comercio exterior y la geopolítica.
Considera que por ello los agentes de carga tienen la misión de asumir un rol protagónico en las estrategias de los clientes para hallar mejores rutas, óptimas condiciones de traslado de mercancías y, quizá lo más difícil, mejores precios de flete marítimo.
Un salto de 70% en 30 días
Estados Unidos es el consumidor más grande del mundo y cualquier modificación en sus regulaciones comerciales tiene un impacto más allá de sus fronteras. El precio de los contenedores marítimos es el mejor ejemplo.
Datos del Índice Mundial de Contenedores (WCI), de la consultora británica Drewry, el costo promedio por contenedor de 40 pies al 6 de junio, fue de 3,527 dólares, 70% más respecto a los 2,076 dólares que alcanzó el 8 de mayo, cuatro días antes de que se anunciara la tregua de 90 días a la guerra arancelaria entre China y Estados Unidos.
Para la líder de la Amacarga es claro que el principal desequilibrio se debe a que empresas estadounidenses se han lanzado a importar grandes volúmenes de mercancías desde China, ante el temor a que entren totalmente en vigor los aranceles previstos por Estados Unidos a productos chinos, en agosto.
¿Contenedores de 6,000 dólares?
El comportamiento de compradores estadounidenses previo a que concluya la pausa arancelaria está generando un efecto de dominó:
- Mayor demanda de contenedores en Estados Unidos: La urgencia por abastecerse antes de que suban los aranceles ha disparado la demanda de contenedores por parte de importadores estadounidenses.
- Escasez generalizada: Al acaparar gran parte de la capacidad logística disponible, los importadores del vecino país dejan menos contenedores y espacios de carga para el mercado mexicano y de otros países.
- Aumento de precios: La Ley de la oferta y la demanda ha dado como resultado que hoy un contenedor que costaba 2,500 dólares puede cotizarse por encima de 6,000 dólares, para el caso de México.
“Están adquiriendo muchísima mercancía y solicitando de más contenedores. Eso está haciendo que la oferta sea menor para el mercado mexicano y para el mundo en general”, resume.

La líder de la Asociación que aglutina a más de 400 empresas alerta que si bien hoy se observan sobrecostos de más del 50% se espera que este mes se alcance 100%, respecto a lo observado a principio de año.
De cumplirse el pronóstico significaría un precio cercano a 4,600 dólares por contenedor tomando como referencia 2,300 dólares que rondaba en promedio a inicios de enero, según datos del operador logístico Eternity Group México.
Esta situación, dice, obliga a los responsables de la logística y traslado de mercancías de importación y exportación, a echar mano de sus capacidades con miras a lograr las mejores condiciones para sus clientes. Sin embargo, reconoce que es imposible esperar costos equiparables a los registrados previo al segundo ciclo de la era Trump.
Protagonistas del comercio internacional
Aunque su labor es reconocida a nivel global, en México el agente de carga sigue siendo, en muchos casos, una figura anónima que incluso es considerada como comisionista de transportistas o agentes aduanales.
Lo anterior a pesar de que se encargan de coordinar toda la ingeniería logística entre el punto de origen y el destino final, ajustando tiempos, costos y requisitos normativos.
Para dignificar esta figura, la Amacarga impulsa una iniciativa de reforma al Código de Comercio que, entre otras cosas, considera un reconocimiento de la figura jurídica del agente de carga y la creación de un registro oficial que las empresas del sector deberán renovar cada cinco años.
En mayo, Eva María de los Dolores fue electa como líder del organismo privado para el periodo 2025-2027, en relevo de Juan Pablo Pacheco Álvarez. Una de las prioridades de su agenda es concretar esta reforma que pronto se discutirá en la Cámara de Diputados.
En paralelo trabajará para avanzar en la profesionalización del gremio impulsando la certificación a partir de los criterios del Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (Conocer) y en la seguridad de los agentes bajo la figura de Operador Económico Autorizado (OEA).
De acuerdo con Muñoz Pineda, esta certeza beneficiará al cliente final y permitirá a las empresas competir en igualdad de condiciones frente a otros mercados donde la figura ya goza de pleno reconocimiento.