El equilibrio de las cadenas de suministro globales está experimentando un cambio profundo en 2025, impulsado por las tensiones comerciales y geopolíticas entre Estados Unidos y China.
Este fenómeno, que comenzó a intensificarse con la guerra comercial en 2018, ha llevado a empresas de todo el mundo a buscar alternativas estratégicas para reducir riesgos, diversificar proveedores y fortalecer la resiliencia de sus operaciones.
Panorama actual de las cadenas de suministro globales
Desde el inicio de la globalización, China ha sido un actor clave en las cadenas de suministro globales. Su posición como "fábrica del mundo" se consolidó gracias a su infraestructura avanzada, costos competitivos y capacidad de producción masiva.
Según datos de la Organización Mundial del Comercio (OMC), China representó el 28.7% de la manufactura mundial en 2022.
Sin embargo, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han alterado esta dinámica. Los aranceles impuestos por ambas partes y la creciente presión sobre temas de propiedad intelectual han generado incertidumbre.
A esto se suman factores como el aumento de los costos laborales en China y la interrupción de cadenas de suministro durante la pandemia de COVID-19, lo que ha motivado a las empresas a reconfigurar sus estrategias.
Factores que impulsan la reconfiguración de las cadenas de suministro
- Restricciones comerciales y geopolíticas: La guerra comercial entre Estados Unidos y China ha generado una serie de aranceles y restricciones que han elevado los costos operativos de las empresas. Además, las tensiones geopolíticas han intensificado el escrutinio sobre las relaciones comerciales con China, especialmente en sectores sensibles como la tecnología y la energía.
- Sostenibilidad y ESG: Los consumidores y reguladores exigen cadenas de suministro más sostenibles. Esto incluye la reducción de emisiones de carbono, el cumplimiento de normativas ambientales y la mejora de las condiciones laborales en toda la cadena de valor.
- Avances tecnológicos: La digitalización está desempeñando un papel crucial en la reconfiguración de las cadenas de suministro. Tecnologías como blockchain, inteligencia artificial (IA) y gemelos digitales están facilitando el monitoreo en tiempo real, la transparencia y la optimización logística.
Estrategias adoptadas por las empresas globales
Nearshoring y reshoring
El nearshoring, que consiste en trasladar operaciones a países cercanos al mercado final, ha ganado popularidad como respuesta a los riesgos asociados con la dependencia de China. México, por ejemplo, se ha convertido en un destino preferido para empresas estadounidenses debido a su proximidad geográfica y su participación en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Ejemplo: Empresas como Tesla y BMW han ampliado sus operaciones en México para reducir costos logísticos y aprovechar incentivos fiscales.
Diversificación de proveedores
Las empresas están buscando alternativas en países como India, Vietnam y Malasia, que ofrecen costos competitivos y políticas favorables para la inversión extranjera directa. Estos países emergentes están desarrollando capacidades para competir con China en sectores clave como electrónica y manufactura.
Digitalización y resiliencia
La adopción de tecnología está transformando la manera en que las empresas gestionan sus cadenas de suministro. La IA, por ejemplo, permite prever interrupciones y optimizar rutas logísticas, mientras que el blockchain asegura la transparencia en el comercio global.
Impacto en Latinoamérica
Las transformaciones en las cadenas de suministro globales están generando un impacto significativo en Latinoamérica, posicionando a la región como un actor clave en la reconfiguración de las estrategias logísticas y comerciales.
Mientras que países como México lideran el nearshoring gracias a su ubicación estratégica y acuerdos comerciales, otras naciones están comenzando a atraer inversiones en sectores clave.
Sin embargo, estas oportunidades también traen consigo desafíos que deben abordarse para maximizar el potencial de crecimiento en la región.
A continuación, exploramos las principales oportunidades y los retos que enfrenta Latinoamérica en este contexto global cambiante.
1. México como líder en nearshoring
México ha emergido como uno de los principales beneficiarios del nearshoring. Su ubicación estratégica, infraestructura en desarrollo y acuerdos comerciales lo posicionan como un socio ideal para las empresas que buscan reducir su dependencia de Asia.
2. Inversiones en la región
Además de México, países como Brasil, Colombia y Chile están atrayendo inversiones en sectores como manufactura, minería y energía renovable. Según el Banco Mundial, la inversión extranjera directa en Latinoamérica creció un 10% en 2023.
3. Retos por superar
A pesar de las oportunidades, la región enfrenta desafíos importantes, como la falta de infraestructura logística avanzada, la corrupción y la volatilidad política en ciertos países. Estos factores pueden limitar el potencial de crecimiento si no se abordan adecuadamente.
La reconfiguración de las cadenas de suministro globales en 2025 es un reflejo de las tensiones geopolíticas y comerciales que dominan la economía mundial.
Las empresas que adopten estrategias proactivas, como el nearshoring, la diversificación de mercados y la digitalización, estarán mejor preparadas para enfrentar estos desafíos.
Para Latinoamérica, esta transformación representa una oportunidad única de crecimiento, siempre y cuando se superen los obstáculos de infraestructura y gobernanza.
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