Berlín, (EFE).- El canciller alemán, Olaf Scholz, respaldó que la Comisión Europea (CE) vaya a efectuar consultas con China para retirar eventualmente los aranceles adicionales anunciados por Bruselas a los vehículos eléctricos chinos, pero le pedió a cambio al gigante asiático que dé un paso para lograr un compromiso.
"Por supuesto que necesitamos proteger nuestra economía de las prácticas comerciales desleales - idealmente con soluciones de mutuo acuerdo. Por lo tanto, es bueno que la CE siga ofreciendo a la parte china conversaciones en el procedimiento antisubvenciones abierto", señaló en la Jornada de la Industria en Berlín.
Scholz recordó que todavía "queda algo de tiempo" hasta el 4 de julio, cuando entrarán de forma provisional en vigor los aranceles que anunció Bruselas a la importación de vehículos eléctricos chinos y que rechaza el canciller alemán.
"Pero está claro que también necesitamos movimientos y avances serios por parte china", ha enfatizado.
El político socialdemócrata ha destacado que el libre comercio es una de las bases de la prosperidad en Alemania y Europa, y que, por eso, defenderá siempre "firmemente ante la nueva CE la necesidad de más y mejores acuerdos de libre comercio".
"No hemos cedido la responsabilidad de la política comercial a Europa para que no se celebren más acuerdos, sino para que se concluyan más", se ha quejado Scholz, un firme defensor de acuerdos como el que negocian desde hace años la Unión Europea (UE) y el Mercosur, que está bloqueado principalmente por la oposición gala.
"Pero eso en este momento no es el caso. Eso no es aceptable en la situación geopolítica en la que nos encontramos", ha defendido Scholz, quien ha expresado su deseo de que la próxima CE y también los demás Estados miembros se pongan "las pilas" y "avancen de una vez".
El canciller alemán ha propuesto una solución a este estancamiento. En su opinión, una forma de acelerar el proceso podría ser organizar los acuerdos comerciales como acuerdos "UE solamente", a fin de evitar años de retrasos causados por la ratificación de veintisiete países.
Esto, ha precisado, lleva a la cuestión de cómo Europa puede reforzar la cohesión en el continente.
"La respuesta corta es que para que Europa siga teniendo éxito, debemos seguir siendo abiertos, resilientes y económicamente fuertes", ha defendido.
Ha considerado "vital" que las empresas europeas cuenten con mejores opciones de financiación a fin de poder crecer en Alemania y Europa, y no tengan que emigrar a EU, por ejemplo, por falta de acceso al capital.
Por eso, ha subrayado, junto con el presidente francés, Emmanuel Macron, aboga por hacer realidad por fin la Unión de Mercados de Capitales, y por eso han puesto también ese proyecto, que también lleva años sobre la mesa en Bruselas, en la lista de tareas pendientes de la nueva Comisión Europea.
Scholz ha reconocido que para que haya cohesión en Europa se requiere crecimiento económico y un Estado más eficiente, tanto para sus ciudadanos como para las empresas, más aún ante el avance de la ultraderecha en algunos países europeos.
"Pandemia, guerra, cambio climático, migración irregular, inflación: las grandes crisis han inquietado enormemente a muchos ciudadanos, tanto, de hecho, que bastantes personas corren el riesgo de perder la confianza en que vamos a superar esto", ha advertido.
Por eso hay que convencer a los ciudadanos con medidas concretas de que la "transformación de nuestra economía no es una amenaza abstracta, sino una oportunidad para modernizar el país y crear crecimiento nuevo", ha opinado.
Scholz ha asegurado que está decidido a solucionar problemas en Alemania como la escasez de mano de obra, la creación de un sistema energético fiable y asequible, atraer inversión, eliminar la burocracia y acelerar los procedimientos. EFE cae/jmj