La reciente decisión del gobierno de Estados Unidos de suspender la emisión de visas de trabajo para conductores extranjeros de camiones comerciales generó incertidumbre en la industria del transporte en México.
Sin embargo, el canciller Juan Ramón de la Fuente aclaró que esta nueva disposición no impactará a los choferes mexicanos que operan bajo el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En conferencia, el funcionario destacó que los transportistas mexicanos utilizan una visa tipo B, reconocida dentro del T-MEC, la cual permite el ingreso a territorio estadounidense exclusivamente para operaciones transfronterizas.
Esta categoría de visa es distinta a las visas E y H, que son las que sí quedarán restringidas tras la nueva medida anunciada en Washington.

“Hasta donde nos hemos podido dar cuenta, la estamos todavía estudiando, pero no parece que va a afectar a los conductores mexicanos. Esto es muy importante decirlo”, afirmó De la Fuente.
El canciller explicó que la disposición busca evitar prácticas de cabotaje, es decir, el traslado de mercancías entre estados dentro de Estados Unidos por parte de operadores extranjeros, algo que no aplica a los transportistas mexicanos.
Estos únicamente pueden realizar cruces fronterizos autorizados entre México y Estados Unidos, sin operar rutas domésticas en territorio estadounidense.
Certidumbre para el autotransporte mexicano
El anuncio brinda tranquilidad a un sector clave para el comercio exterior. De acuerdo con la Secretaría de Economía, más del 80 % de las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos se realizan por carretera.
La confirmación de que las nuevas disposiciones no aplicarán a los transportistas mexicanos significa que los flujos de comercio en la frontera podrán continuar sin cambios inmediatos.
No obstante, De la Fuente subrayó que la Cancillería y su Consultoría Jurídica continúan analizando de manera permanente las implicaciones de la política estadounidense.
“A veces hay declaraciones de algún funcionario que no necesariamente tienen un impacto directo o inmediato sobre el caso mexicano”, puntualizó.
La aclaración es relevante para fabricantes, exportadores, importadores y operadores logísticos que dependen del transporte terrestre entre ambos países. Con la continuidad de la visa tipo B, las empresas mexicanas podrán mantener sus operaciones de comercio exterior sin temor a interrupciones derivadas de la nueva disposición.
En este sentido, la declaración del canciller refuerza la importancia del marco del T-MEC como garante de certeza jurídica en el flujo de mercancías y movilidad de operadores.