La resiliencia y la flexibilidad empresarial son clave para hacer frente a lo inesperado, pero ¿cuánto valoras las métricas de sostenibilidad, como la diversidad y la huella de carbono, en tu cadena de suministro?
Es la principal interrogante que plantea el banco HSBC en un whitepaper que distingue entre las cadenas de suministro tradicionales y los nuevos formatos que intensificaron su aparición a raíz de la pandemia de Covid-19.
Incluso antes de que el nuevo coronavirus pusiera al mundo de cabeza, a los jefes corporativos les preocupaba que sus organizaciones estuvieran demasiado aisladas y empantanadas en una complejidad estructural, destacó el documento.
Cadenas de suministro flexibles
Desde antes del Covid-19, los logísticos del mundo ya evaluaban la necesidad de cadenas de suministro más flexibles ante los efectos del cambio climático y los desastres naturales como los huracanes y las inundaciones.
Las cadenas de suministro tradicionales son lineales: diseño, materiales, fabricación, ventas, marketing, pedidos, logística.
El trabajo de campo involucrado en la coordinación de proveedores de servicios, agentes y clientes es alucinante, y cada paso depende del anterior.
En cambio, las cadenas de suministro digitales actuales comparten datos y visibilidad en todos los enlaces y en tiempo real.
La recopilación de información que requiere mucha mano de obra, como el análisis de pronósticos de ventas, la disponibilidad de materiales y el desempeño de los proveedores, se puede ver a medida que se desarrollan los eventos.
Esta transparencia de datos puede permitir una mejor comprensión de los inventarios y ayuda a construir relaciones más estrechas a lo largo de la cadena, al tiempo que permite una rápida toma de decisiones cuando se requieren acciones correctivas.
También puede tener un efecto significativo en la mejora y medición de la sostenibilidad de una cadena de suministro, desde su huella de carbono hasta su impacto social.
Hacia la sostenibilidad de la cadena de suministro
Según un análisis de Boston Consulting Group (BCG), las cadenas de suministro globales representan el 80% de las emisiones de carbono del planeta.
De estos, más del 90% de las empresas en cualquier cadena de suministro son PyMEs, algunas tan pequeñas que pasan desapercibidas.
El dato no sorprende si tenemos en cuenta que las empresas con frecuencia tienen contratos solo con proveedores inmediatos de nivel 1. Sin embargo, las capas más allá de ese nivel también tienen sus proveedores, que a su vez tienen sus propios proveedores, y así sucesivamente.
Por si te lo perdiste:
Interrupción en la cadena de proveedores, amenaza para las empresas mexicanas
Por tanto, el impacto ambiental de una cadena de suministro compleja puede tener varios niveles de profundidad.
Claramente, la única forma de alcanzar el objetivo del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) es integrar la sostenibilidad en cada eslabón de la cadena, destacó el texto.
Para lograr dicho objetivo es necesario contar con una fuerza laboral interesada en el cuidado del medio ambiente y en la conformación de cadenas de suministro flexibles y sustentables. Por tanto, es necesario hacerse de personal que piense más allá de la supply chain tradicional.
Las organizaciones que están abiertas a diversos puntos de vista y reclutan personas que piensan, se ven y se sienten de manera diferente, se benefician de diferentes voces en la mesa.
Una fuerza laboral heterogénea mantiene a los jefes alerta, asegura que las empresas no se queden estancadas y los prepara para los desafíos futuros.
Siete acciones para lograr la sostenibilidad de la cadena de suministro
El documento, por tanto, enlista siete formas en que las cadenas de suministro pueden convertirse en contaminante cero.
1. Reconsidera el diseño del producto: no modifiques los límites de la huella de carbono de un producto; vuelve a evaluar cómo se fabrica y cómo se usa, luego comienza de nuevo. Haz productos que duren.
2. Adopta la colaboración: los pequeños proveedores y las grandes empresas deben trabajar juntos. Comparte conocimientos, tecnología, inversiones y recursos en todo el sector, no solo dentro de las cadenas de suministro.
3. Desarrolla capacidades: acelera el cambio a cero emisiones netas con capacitación y desarrollo de capacidades. Un buen ejemplo son los talleres de reducción de emisiones de BMW para proveedores de nivel 1 y 2.
También lee:
3 claves para la construcción de operaciones resilientes y sostenibles
4. Invierte en tecnología: acelera la investigación y desarrollo de 'tecnología climática' en combustibles alternativos, fabricación de bajo consumo energético, metodología de captura de carbono y lleva rápidamente al mercado tecnología útil.
5. Desarrolla mejores estructuras de datos: recopilar datos (por ejemplo, uso de agua, emisiones de carbono, condiciones laborales) a lo largo de la cadena de suministro en tiempo real es la clave para una medición precisa.
6. Piensa en las políticas y los estándares de manera integral: establece un estándar común alto pero viable, en lugar de cambiar continuamente las políticas, los estándares y las prácticas, lo que puede resultar complejo y costoso.
7. Considera el financiamiento: los pequeños proveedores a menudo no pueden financiar estrategias de cero emisiones netas. De optar por esta alternativa, utiliza estructuras de datos para brindar transparencia sobre hacia dónde se dirige el dinero.
THE LOGISTICS WORLD