Conoce un nuevo método para fortalecer las cadenas de suministro

Muchos factores contribuyen a los desafíos de la cadena de suministro, como las tensiones geopolíticas, conflictos sectoriales (como las huelgas), las fluctuaciones de la demanda, los desastres naturales, los cambios regulatorios, la escasez de mano de obra, los problemas climáticos y la escasez de materias primas. Disrupción es uno de los factores más frecuentes en supply chain y también uno de los más temidos. 

Marzieh Khakifirooz, profesora de Investigación en Cadena de Suministro Tecnológico de Monterrey –con 13 años en industria y cinco años en la academia– ha desarrollado, junto con su equipo de investigación, un método nuevo y sencillo para ayudar a las empresas a identificar los puntos débiles en sus cadenas de suministro. Este método permite a las empresas ver dónde podrían ocurrir problemas y tomar medidas para prevenirlos, haciendo que sus cadenas de suministro sean más robustas y confiables.  

Khakifirooz, en entrevista con TLW®, comparte los principios de este método, desde sus bases, para que las empresas que integran a la cadena de suministro puedan considerarlo en sus estructuras.  

La investigadora señala, primero, que en este caso usaron un concepto llamado "entropía", que, en términos simples, es una forma de medir la incertidumbre o el desorden. Al calcular la entropía para diferentes partes de la cadena de suministro, identificaron qué áreas tenían más probabilidades de experimentar problemas. 

Esta perspectiva contrasta con los métodos tradicionales que se centran en la fuente de la interrupción como una forma común de categorizar estos desafíos. Sin embargo, en opinión de Marzieh Khakifirooz, la dependencia logística global es un factor más amplio que abarca muchos de estos problemas, una perspectiva que desplaza el enfoque hacia las dependencias sistémicas. Precisamente, el método de la Prueba de Estrés que ella propone cumple con esta visión más amplia. 

Al analizar las relaciones logísticas globales se abordan como dependencias sistémicas que representan un marco estratégico que permite abordar desafíos de manera más holística, yendo más allá de las causas inmediatas de las disrupciones. 

Analizar las interrupciones de la cadena de suministro a través de la lente de las dependencias sistémicas ofrece un enfoque más estratégico. Nos permite recuperar y fortalecer la cadena de suministro al observar el panorama general, mapear la red general e identificar nodos vulnerables que pueden causar efectos en cascada”: 

Marzieh Khakifirooz

Al identificar proactivamente estos puntos débiles, las empresas pueden fortalecer sus cadenas de suministro, garantizando operaciones más fluidas y una mejor preparación contra desafíos imprevistos. Al analizar estas partes, el método ayuda a identificar: 

• Dónde la demanda podría exceder la capacidad de producción de una fábrica. 

• Dónde los costos de almacenamiento son altos, lo que podría generar mayores gastos. 

• Dónde los retrasos o costos de transporte podrían causar problemas. 

Un método para identificar debilidades en supply chain 

En estas nuevas aproximaciones en la gestión de la cadena de suministro el Test de Estrés es una medida que considera algunas métricas útiles para cualquier tamaño de las empresas, “No importa si son fabricantes, si son sectores logísticos, si son minoristas, no importa cuál es el tamaño de su cadena de suministro y cuál es su rol en la cadena de suministro, pueden tener un método, un tipo de índices estándar para usarlo como un método de prueba de estrés”, señala la investigadora. 

¿Qué es el método de prueba de estrés? El método de prueba de estrés ayuda a las entidades para entender en orden a entender cómo bien su cadena de suministro puede durar la disrupción. Si tenemos un fallo de suministro, si tenemos un retraso en la transportación, si tenemos algún tipo de disrupción, cómo podrían manejar esa interrupción. 

Desde una perspectiva empresarial, los beneficios clave son la rentabilidad, el cumplimiento de la demanda y el acceso al mercado. Sin embargo, desde una perspectiva más amplia y de alto nivel, lo veo como una cuestión de garantizar la viabilidad, la resiliencia, la agilidad y la sostenibilidad de la cadena de suministro: “En mi opinión, estos factores son fundamentales y universalmente críticos para empresas de cualquier tamaño o tipo”, afirma la entrevistada y los explica: 

• Viabilidad. Garantiza que las empresas puedan seguir operando en condiciones cambiantes (rentabilidad) 
• Resiliencia. Permite a la cadena de suministro recuperarse rápidamente de los shocks (cumplimiento de la demanda) 
• Agilidad. Favorece que la empresa se adapte a las fluctuaciones del mercado o eventos inesperados (acceso al mercado) 
• Sostenibilidad. Se alinea con los objetivos comerciales a largo plazo (punto que atañe a todos los factores). 

Desglosando conceptos básicos 

La entropía mide el grado de aleatoriedad o desorden, que puede reflejar directamente la imprevisibilidad de los eventos de la cadena de suministro, como las fluctuaciones de la demanda o los retrasos en el transporte. Es versátil y se puede aplicar a niveles micro (por ejemplo, niveles de inventario en un solo almacén) o macro (por ejemplo, flujos comerciales globales) de la cadena de suministro. Por lo general, los niveles de entropía más bajos pueden indicar previsibilidad, mientras que los niveles más altos sugieren áreas que requieren una mayor supervisión o estrategias adaptativas. 

“En nuestra investigación, introdujimos la entropía como un índice para evaluar cómo se propagan las interrupciones en un nodo a través de la red. Por ejemplo, si la capacidad de una planta se excede o se reduce, afecta a los nodos conectados, como puertos y minoristas, identificando así vulnerabilidades en cascada”, detalla. 

Para ilustrar esto mejor, imaginemos una red de cadena de suministro donde una planta produce bienes, que se envían a puertos para su exportación y luego se entregan a minoristas. Cada parte de esta red (plantas, puertos y minoristas) depende del flujo fluido de mercancías. 

Primero, observan cuánta carga puede manejar el nodo en comparación con lo que está haciendo actualmente (Paso de Utilización de Capacidad). Luego miden la diferencia entre lo que entra en un nodo y lo que sale (Paso de Desequilibrio de Flujo). 

Posteriormente, analizan los diferentes estados en los que puede estar un nodo, como manejar flujo alto, medio o bajo: “Calculamos con qué frecuencia ocurre cada estado en comparación con el número total de veces que hemos observado el nodo. Esto nos da la ‘probabilidad’ de cada estado. Utilizamos las probabilidades para medir la imprevisibilidad del nodo. Si un nodo permanece constantemente en un estado, tiene una entropía baja (predecible). Si cambia con frecuencia entre estados, tiene una entropía alta (impredecible). (Paso de Cálculo y Propagación de Entropía)”. 

Luego hay que plantearse ¿cuáles nodos pueden fallar durante la disrupción? Estos son los factores importantes que el enfoque de la prueba de estrés se busca descubrir.  

También utilizan el concepto "valor en riesgo" (VaR), un método que se usa a menudo en finanzas, para estimar pérdidas potenciales. Al aplicarlo a la cadena de suministro, pueden identificar qué fábricas o puertos tenían un mayor riesgo de causar retrasos o cuellos de botella.  

Sin embargo, en el método propuesto por Khakifirooz, para calcular el VaR analizaron los resultados derivados de la entropía, no los datos financieros en sí. “En nuestra investigación, empleamos VaR para evaluar cuándo la vulnerabilidad de un nodo alcanza un umbral crítico. En nuestro enfoque, la vulnerabilidad de cada nodo se representa como una distribución probabilística. Luego se crea la distribución probabilística para toda la red de nodos”. 

El VaR se calcula como el valor umbral por debajo del cual se encuentra un porcentaje especificado (por ejemplo, 95%) de nodos vulnerables. Los nodos por encima de este umbral se consideran nodos de riesgo en la red de la cadena de suministro. “Medimos estos índices para diferentes características de la red, incluidos la demanda, el tiempo de entrega, el costo de logística y el nivel de servicio o grado de conectividad con otros nodos”. 

La Prueba de Estrés diseñada por este equipo del ITESM representa un enfoque práctico para ejecutarse, concretamente, como prueba de esfuerzo en el análisis de la red de la cadena de suministro. Permite la realización de los siguientes aspectos-clave: 

1. Determinar cómo puede resistir interrupciones la cadena de suministro, tales como fallas de proveedores, retrasos en el transporte o aumentos repentinos de la demanda. 

2. Resaltar nodos o procesos que tienen más probabilidades de fallar bajo estrés, como almacenes con sobrecapacidad o rutas de transporte con cuello de botella. 

3. Además, el modelo combinado de Entropía-VaR se puede utilizar en un sistema de tablero de instrumentos basado en datos para visualizar la condición de cada nodo en la cadena de suministro. 

4. Estrategias de resiliencia proactiva. Empodera a las empresas a pasar de la gestión de riesgos reactiva a la proactiva. 

Es importante considerar que para que pueda desarrollarse el método VaR-Entropía hay una estrecha dependencia de datos. Este método se basa en gran medida en datos precisos, granulares y actualizados sobre las operaciones de la cadena de suministro. Cualquier sesgo en los datos conducirá a resultados inexactos.  

De igual manera, plantea métricas cuantitativas. El método hace énfasis en las métricas numéricas, pero puede pasar por alto factores cualitativos, como las relaciones con los proveedores, las diferencias culturales o las influencias políticas que a veces son la base para construir redes en la cadena de suministro e incluso en situaciones críticas los interesados prefieren trabajar con socios arriesgados debido a tales aspectos cualitativos. 

Cuando las empresas se preocupan por los "costos de la cadena de suministro", los "niveles de servicio" y la "optimización de la logística"; los gobiernos consideran "infraestructura crítica", "estabilidad económica" y "preparación para desastres" y las ONG como "equidad social", "sostenibilidad" y "resiliencia comunitaria", se requiere un lenguaje común que pueda cubrir todos los aspectos que son importantes para las diferentes partes interesadas. 

Utilizar métricas de resiliencia para la evaluación de riesgos es un lenguaje común para todas las partes interesadas, mientras que las herramientas tradicionales de evaluación de riesgos se centran únicamente en las interrupciones operativas o las métricas estáticas.   

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Comprender y analizar factores como la capacidad de producción, los costos de almacenamiento, los niveles de demanda y los retrasos en el transporte pueden mejorar significativamente la capacidad de una empresa para prevenir interrupciones. Al identificar proactivamente estos puntos débiles, las empresas pueden fortalecer sus cadenas de suministro, garantizando operaciones más fluidas y una mejor preparación contra desafíos imprevistos.   

Estos razonamientos son útiles para empresas pymes que para grandes corporaciones de la cadena de suministro. De igual forma funciona para sectores logísticos con sistemas más maduros, que para los que todavía son emergentes.  

Rubros a los que les es útil la prueba de estrés 

El método discutido impacta una amplia gama de industrias que dependen de cadenas de suministro complejas para entregar productos y servicios a los clientes. Los sectores particularmente afectados incluyen: 

Industrias manufactureras. Sectores como el automotriz, de electrónica y maquinaria, dependen de múltiples proveedores y redes de distribución intrincadas. Las interrupciones pueden detener las líneas de producción, por lo que la resiliencia es crucial. 

Comercio minorista y bienes de consumo. Los supermercados, las tiendas de ropa y las empresas de comercio electrónico necesitan cadenas de suministro eficientes para mantener los estantes abastecidos y cumplir con los pedidos de los clientes de manera rápida. 

Productos farmacéuticos y atención médica. La entrega oportuna de medicamentos, dispositivos médicos y suministros es vital. Las debilidades en la cadena de suministro pueden afectar directamente la atención al paciente y los resultados de salud. 

Industria de alimentos y bebidas. Este sector requiere una coordinación cuidadosa para garantizar que los productos frescos y perecederos lleguen a los consumidores sin demora, manteniendo los estándares de calidad e higiene. 

Tecnología y electrónica. Las empresas que producen computadoras, teléfonos inteligentes y otros dispositivos dependen de componentes de varios proveedores en todo el mundo. Las interrupciones en la cadena de suministro pueden retrasar los lanzamientos de productos e impactar las ventas. 

Logística y transporte. Las empresas que se dedican a mover mercancías, como las compañías navieras, los transportistas de carga y los servicios de entrega, deben comprender y mitigar las vulnerabilidades para mejorar la eficiencia y la confiabilidad. 

Sector energético. Industrias como el petróleo, el gas y las energías renovables dependen de las cadenas de suministro para distribuir los recursos y componentes necesarios para la producción y entrega de energía. 

Agricultura. Los agricultores, los procesadores de alimentos y los distribuidores dependen de las cadenas de suministro para llevar los productos desde los campos hasta los mercados. Las interrupciones pueden afectar la disponibilidad de alimentos y los precios. 

Ropa y textiles. Los fabricantes de ropa obtienen materiales y mano de obra a nivel mundial. La resiliencia de la cadena de suministro garantiza la disponibilidad constante de productos y gestiona los costos. 

Construcción y sus materiales. La entrega oportuna de materiales como madera, acero y concreto es esencial para los plazos de los proyectos y la gestión de costos. 

Para conocer el estudio completo desarrollado por Marzieh Khakifirooz y su equipo en el ITESM haz click aquí. Las empresas que deseen contactar a la experta para implementar este enfoque en su cadena de suministro, pueden escribir a: [email protected]