El Nuevo Régimen de Origen del MERCOSUR (ROM), implementado en 2023, representa uno de los cambios más significativos en las reglas comerciales del bloque sudamericano en los últimos años.
Con el objetivo de facilitar el comercio intrarregional y aumentar la competitividad global, este reciente cambio en el marco normativo introduce importantes modificaciones que afectan a las empresas exportadoras, importadoras y a los operadores logísticos de los países miembros.
Para México y Latinoamérica, comprender estas nuevas reglas es clave para identificar oportunidades y desafíos en el comercio internacional.
¿Qué es el nuevo régimen de origen del MERCOSUR?
El Nuevo Régimen de Origen del MERCOSUR (ROM), implementado a partir de la Decisión 05/2023 del Consejo de Mercado Común (CMC), es un conjunto de reglas diseñadas para facilitar el comercio entre los países miembros del MERCOSUR. Estas normas determinan las condiciones bajo las cuales un producto puede considerarse "originario" de uno de los Estados Parte y, por lo tanto, beneficiarse de aranceles preferenciales en el comercio intrarregional.
Esta nueva normativa tiene el objetivo de profundizar la integración económica regional al reducir las barreras comerciales, simplificar los procedimientos y brindar mayor seguridad jurídica a los operadores del comercio internacional.
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Principales cambios introducidos por el nuevo régimen de origen
- Simplificación de las Normas de Origen
Uno de los cambios más importantes del ROM es la eliminación de la "regla general" de origen, que solía aplicarse de manera amplia para productos que involucraban insumos de fuera del MERCOSUR. Ahora, cada producto tiene un Requisito Específico de Origen (REO), lo que permite mayor precisión y transparencia en la definición de qué productos pueden ser considerados como originarios.
Este cambio no solo simplifica las normas, sino que también reduce la incertidumbre para los exportadores, al saber con claridad qué insumos pueden usar en la producción de bienes destinados a la exportación dentro del bloque.
- Autocertificación de Origen: Mayor Facilidad para Exportadores
Otra innovación del ROM es la autocertificación de origen, un mecanismo que permite a los propios exportadores declarar el origen de sus productos sin la necesidad de certificaciones adicionales. Este sistema, ya adoptado en varios acuerdos comerciales internacionales, reduce costos y agiliza los tiempos de exportación, beneficiando a empresas que buscan expandir sus operaciones en mercados intrarregionales.
- Mecanismos de Verificación y Control
El ROM también introduce procedimientos más ágiles para la verificación y control del origen de los productos, evitando procesos largos y complicados. Ahora, en caso de duda sobre la veracidad del origen de un bien, las autoridades aduaneras pueden solicitar información adicional a través de mecanismos simplificados, lo que mejora la eficiencia y reduce el riesgo de demoras en los trámites aduaneros.
Impacto del nuevo régimen de origen en el comercio internacional de México
Si bien México no es miembro del MERCOSUR, las nuevas normas del ROM presentan oportunidades interesantes para las empresas mexicanas, especialmente aquellas que mantienen relaciones comerciales con países del bloque. Al contar con reglas de origen más claras y procesos simplificados, las empresas mexicanas pueden optimizar sus cadenas de suministro, aprovechando insumos de la región sin perder los beneficios arancelarios.
Sin embargo, estos cambios también traen retos, como la necesidad de adaptarse a nuevas certificaciones y entender los REOs específicos de cada producto, los operadores logísticos en México deberán estar atentos a las modificaciones para evitar interrupciones en el comercio con países del MERCOSUR, especialmente cuando se utilicen insumos extrarregionales.
Comparación con otras normas comerciales en América Latina
El T-MEC, que reemplazó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), es el principal acuerdo comercial de México y establece reglas específicas de origen para asegurar que los productos que circulan entre México, Estados Unidos y Canadá sean fabricados con componentes originarios de estos países.
A continuación, se destacan algunas diferencias clave con el ROM del MERCOSUR
Diferencias entre el MERCOSUR y el T-MEC
Reglas de origen específicas frente a la eliminación de la regla general:
- En el T-MEC, se aplican reglas estrictas de origen para sectores clave como la industria automotriz, donde un alto porcentaje de los componentes de los productos debe ser originario de la región. Estas reglas están diseñadas para proteger las cadenas de valor norteamericanas.
- En el ROM del MERCOSUR, se ha eliminado el concepto de "regla general", y se introducen Requisitos Específicos de Origen (REO) para cada producto. Esto otorga mayor flexibilidad a los exportadores del MERCOSUR, ya que pueden adaptar los insumos de extrarregión sin perder beneficios arancelarios, siempre y cuando cumplan con los REO.
Autocertificación de origen:
- Tanto en el T-MEC como en el ROM del MERCOSUR, se permite la autocertificación de origen, lo que significa que los exportadores pueden certificar ellos mismos que sus productos cumplen con los requisitos de origen, sin la necesidad de documentos emitidos por autoridades oficiales.
- Sin embargo, en el caso del MERCOSUR, esta es una innovación reciente que todavía está siendo adoptada de manera progresiva, mientras que en el T-MEC ya es una práctica consolidada.
Ámbito de aplicación y alcance geopolítico:
- El T-MEC regula el comercio entre tres economías altamente industrializadas (México, Estados Unidos y Canadá), que están más integradas en términos de cadenas de suministro. Las reglas de origen del T-MEC están diseñadas para proteger las industrias manufactureras clave, especialmente en sectores como la automotriz, textil y tecnológica.
- El ROM del MERCOSUR, en cambio, está enfocado en un bloque que incluye a Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, con economías más diversas y con un enfoque mayor en la integración comercial dentro de América del Sur.
¿Qué pueden aprender México y Latinoamérica del nuevo régimen?
La adopción de la autocertificación y los mecanismos simplificados de verificación de origen son prácticas que México podría considerar para mejorar la competitividad de sus propias empresas en el comercio internacional, especialmente en el marco del T-MEC y otros acuerdos multilaterales.
El ROM no solo busca facilitar el comercio entre los países del MERCOSUR, sino que también tiene el potencial de aumentar la competitividad de la región en el contexto global, al reducir las barreras arancelarias y agilizar los procesos aduaneros, el MERCOSUR se posiciona como un bloque comercial más eficiente y atractivo para los socios comerciales externos.
Cada acuerdo comercial en América Latina tiene características específicas que responden a las necesidades y prioridades de los países miembros, el Nuevo Régimen de Origen del MERCOSUR se enfoca en la simplificación y flexibilización de las normas para fomentar el comercio dentro del bloque, mientras que el T-MEC y la Alianza del Pacífico adoptan enfoques más protectores o globales en sus reglas de origen. Las empresas mexicanas que participan en el comercio internacional deben mantenerse informadas sobre estos acuerdos para identificar las mejores oportunidades comerciales y ajustar sus estrategias logísticas en función de las normativas específicas de cada tratado.
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Preguntas frecuentes
El Nuevo Régimen de Origen del MERCOSUR (ROM) es un conjunto de normas que establece los requisitos que debe cumplir un producto para ser considerado originario de los países miembros del MERCOSUR, permitiendo que esos productos se beneficien de aranceles preferenciales dentro del bloque.
Aunque México no es parte del MERCOSUR, las empresas mexicanas que comercian con países miembros del bloque pueden verse afectadas por las nuevas normas. Los cambios en las reglas de origen pueden simplificar el acceso a estos mercados, pero también requieren que las empresas estén al tanto de los nuevos requisitos específicos para cada producto.
Algunos de los principales cambios incluyen la eliminación de la "regla general" de origen, la introducción de requisitos específicos de origen (REO), la autocertificación de origen, y nuevos mecanismos simplificados para la verificación y control de origen.
La autocertificación de origen es un mecanismo que permite a las empresas exportadoras certificar ellas mismas el origen de sus productos, sin necesidad de obtener un certificado de origen de una autoridad externa. Esto simplifica los procesos aduaneros y reduce costos para los exportadores.
El ROM introduce normas más claras y procedimientos simplificados que reducen la complejidad y los tiempos de gestión en las aduanas. Para las empresas de logística, esto se traduce en una mayor eficiencia operativa, especialmente al gestionar mercancías entre los países del MERCOSUR.
Las reglas de origen del MERCOSUR se han simplificado significativamente con el ROM, mientras que el T-MEC sigue utilizando tanto reglas generales como específicas. En el MERCOSUR, cada producto tiene un requisito específico de origen, lo que ofrece mayor claridad y flexibilidad, mientras que en el T-MEC, los requisitos son más rígidos y específicos según el sector.