La segunda etapa de la verificación semestral obligatoria de emisiones contaminantes para el autotransporte federal y el transporte privado está en marcha.
Desde el 1 de julio y hasta el 31 de diciembre, todas las unidades que circulan en carreteras federales deben someterse a esta revisión para cumplir con lo establecido por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
¿A quiénes aplica?
El requisito es obligatorio para:
- Vehículos del autotransporte federal de carga general y especializada, así como de pasajeros y turismo.
- Unidades de transporte privado que utilicen diésel, gasolina, gas licuado de petróleo (GLP), gas natural o mezclas de estos combustibles.
En ambos casos, la revisión se enfoca en medir la opacidad del humo y la concentración de gases contaminantes.
Calendario de cumplimiento
La normativa establece dos periodos anuales:
- Primera verificación: del 1 de enero al 30 de junio.
- Segunda verificación: del 1 de julio al 31 de diciembre.
Esto significa que, durante el segundo semestre del año, los transportistas deben asegurarse de que sus unidades acrediten la prueba antes de que concluya diciembre.

¿Por qué es importante?
Además de evitar sanciones y restricciones para circular en carreteras federales, la verificación busca reducir las emisiones contaminantes que genera el parque vehicular del autotransporte, muchas veces conformado por unidades con más de una década en operación.
De acuerdo con especialistas del sector, mantener la flota en condiciones adecuadas no solo ayuda a cumplir con la regulación, sino que también reduce costos derivados de fallas mecánicas y mejora la eficiencia del consumo de combustible.
Recomendaciones para los transportistas
Para agilizar el proceso y evitar contratiempos, es recomendable:
- Agendar la cita con anticipación en los centros autorizados.
- Realizar mantenimiento preventivo a los sistemas de combustión y escape.
- Llevar un control interno de las unidades ya verificadas y aquellas que están pendientes.
- Conservar los comprobantes oficiales como respaldo ante inspecciones.
El cumplimiento de esta disposición no solo responde a una obligación legal, sino que también forma parte de los esfuerzos hacia una movilidad más limpia y sostenible.
Con el transporte como uno de los principales generadores de emisiones en el país, la verificación semestral es una pieza clave para avanzar en la reducción de contaminantes y en la construcción de una logística más responsable.