Manufactura fuera de China, retailers preocupados por crear resiliencia, metas de sustentabilidad, objetivos de crecimiento para la producción doméstica y cadenas de suministro regionales más fuertes marcarán el futuro de la supply chain global, aseguró el economista e historiador Marc Levinson.
Durante la conferencia "Cadenas de suministro globales: desafíos y amenazas en el escenario actual", en el marco de THE LOGISTICS WORLD SUMMIT & EXPO, el analista detalló que México enfrenta una oportunidad única para crecer en el comercio internacional ante los actuales retos que enfrenta la supply chain mundial.
Señaló que la globalización no morirá pero está cambiando debido a que los costos de producción están subiendo en todo el mundo y la gente ha comenzado a adquirir otro tipo de bienes derivado del incremento poblacional y la cada vez mayor adquisición de intangibles, como la música.
Recordó que la cadena de suministro en México comenzó de un modo diferente a otros países debido a que durante muchos años su comercio fue exclusivamente con las naciones vecinas, sobre todo Estados Unidos, con quien tiene una ventajosa (pero peligrosa, añadió) dependencia.
Dijo que hay cuatro puntos específicos que podrían amenazar el buen desarrollo de la cadena de suministro nacional con miras a ganar más terreno como país exportador.
- El incremento del proteccionismo estadounidense podría significar un riesgo para la manufactura mexicana.
- La industria de las autopartes en México, que actualmente registra 80 billones de dólares anuales en exportación, podría estancarse ante el uso y venta cada vez mayor de vehículos eléctricos.
- ¿Podrá México convertirse en algo más que un país exportador de manufacturas?
- La seguridad preocupa y podría afectar a futuras inversiones en el país.
Sobre la intención de las empresas y retailers por ofrecer productos sustentables a sus clientes, apuntó que México deberá atender la preocupación actual por encontrar nuevas formas de energía que sustituyan a los combustibles fósiles.
"Será complicado porque hay cierta resistencia al cambio y sabemos que México tiene una historia muy cercana al petróleo y sus derivados, pero las empresas quieren saber las cifras que resultan de los procesos de producción y distribución de mercancías, queremos reducir las emisiones contaminantes año tras año y van a exigir que sus proveedores colaboren para la conformación de una cadena de suministro verde”.
Marc Levinson, Economista e historiador