informa hoy el diario hongkonés South China Morning Post.
Un equipo de la Universidad de Tsinghua está en conversaciones con las autoridades de la localidad de Xiongan (norte) para seleccionar un lugar para construir el proyecto, que consiste en un acelerador de partículas con una circunferencia entre 100 y 150 metros, aproximadamente el tamaño de dos canchas de baloncesto, según el medio.
Los expertos esperan que el haz de electrones del acelerador se transforme en una fuente de luz de alta calidad para la fabricación de chips y la investigación científica.
Esta innovación podría fomentar una fabricación de chips de alto volumen y bajo coste y potencialmente impulsar a China a un papel de liderazgo en la producción industrial de chips avanzados, informa el diario.
Se trata de un proyecto que se inició en 2017, pero que recientemente ha cobrado relevancia pública debido a las restricciones estadounidenses al acceso chino a tecnología de Estados Unidos y debido a los avances de empresas del país asiático como Huawei en la fabricación de semiconductores.
"Una de las posibles aplicaciones de nuestra investigación es como fuente de luz para futuras máquinas de litografía de luz ultravioleta extrema (EUV, en inglés). Creo que por eso la comunidad internacional está prestando mucha atención", dijo el líder del proyecto, el profesor Tang Chuanxiang, de Tsinghua, citado por el rotativo.
La teoría detrás del proyecto es un nuevo mecanismo de luminiscencia llamado microagrupamiento estacionario (conocido como SSMB), que usa la energía liberada por las partículas cargadas durante la aceleración para actuar como fuente de luz.
El resultado es una luz EUV continua, pura y con un ancho de banda estrecho y un pequeño ángulo de dispersión.
En comparación con la tecnología EUV actual, el SSMB es una fuente de luz con una potencia media más alta y una mayor producción de chips con un menor coste unitario.
El sector de los semiconductores es clave para China, ya que se trata de uno de los puntales de sus planes para reforzar su autosuficiencia tecnológica y reducir así su dependencia de terceros países ante la guerra comercial y las sanciones impuestas por Estados Unidos. EFE
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