Cracovia (Polonia), (EFE).- El sector agrario polaco continúa con sus protestas en todo el país con el bloqueo de autopistas y manifestaciones, mientras el primer ministro Donald Tusk exigió a Bruselas "medidas drásticas" para aplacar a los agricultores.
Cientos de tractores mantienen bloqueadas varias autopistas en toda Polonia y en los centros de varias ciudades, como Breslavia (oeste), donde se produjeron varias quemas de mobiliario urbano, ha habido enfrentamientos entre manifestantes y la policía.
Los agricultores polacos protestan desde hace meses contra la importación de productos agroalimentarios de Ucrania sin cupos ni controles de calidad, así como contra el Pacto Verde de Bruselas, cuyas exigencias de producción podrían, según los sindicatos, acabar con el 50% de los negocios polacos.
Mientras tanto, el primer ministro polaco, Donald Tusk, declaró desde la frontera con Bielorrusia, donde se entrevistó con su homólogo finlandés, Petteri Orpo, que "la guerra (en Ucrania) no puede ser la causa de las drásticas pérdidas sufridas por la agricultura polaca".
"Tenemos derecho a esperar que la Unión Europea aumente el alcance de sus ayudas y protección de la agricultura europea, especialmente de la agricultura polaca" afirmó Donald Tusk.
El primer ministro polaco se quejó de "la situación de desigualdad a la que se enfrenta Polonia ante los productos agrícolas que llegan de más allá de la frontera oriental, principalmente de Ucrania", y anunció que "intervendría a nivel europeo".
En declaraciones a la prensa junto al primer ministro finés, Tusk recordó que "Polonia y Finlandia son países muy comprometidos con el apoyo a Ucrania, y han dado ejemplo de cómo hay que ayudar en tiempos de guerra", pero "hay que ser coherente" y "no permitir la competencia desleal".
Los agricultores polacos mantienen bloqueado un paso fronterizo con Ucrania para impedir la entrada de camiones con mercancías.
Hace unos días tuvo lugar un ataque contra tres de esos camiones, cuyo cargamento fue vertido a la carretera, lo que provocó protestas oficiales del Gobierno de Kiev. EFE mag/cph/jmj